COMO DECÍA MI ABUELA

Con las mujeres al frente…

Me permito tomar prestado el espacio de mi abuela en el marco del 8M para hablar una vez más de la Feminismocracia, el orden político en el que, como dice Yndira Sandoval, se cuenta «con las mujeres al frente y nuestros derechos en el centro».

Para que este nuevo orden político llegue a surgir es necesario revisar qué mujeres van a colocar nuestros derechos al centro desde su trinchera porque, tristemente, hemos observado que no basta con ser mujer para defender los principios del feminismo y los derechos humanos de todos.

Si definimos al feminismo como el movimiento político por la abolición de todas las formas de opresión, discriminación y violencia en contra de las mujeres nos daremos cuenta que dicho movimiento forma parte de la lucha histórica para la defensa de los derechos humanos.

En un mundo donde existen las «regalonas del patriarcado» como señalaba Margarita Pizano aquellas mujeres líderes que son cooptadas por el machismo y que trabajan en beneficio de perpetuar la violencia estructural y sistemática en razón del género, necesitamos mujeres que sean la contraparte, mujeres que no solamente llenen las cuotas de paridad sino que además en la sustancia velen por garantizar nuestro derecho a una vida libre de violencia, en todos los aspectos de nuestras vidas, desde el más privado hasta el más público.

Justamente por ello debemos celebrar la armonización de la 3 de 3 contra la violencia en todos los niveles y todas las esferas no solamente en el ámbito político, sino en las instituciones, en las empresas privadas, en las universidades.

Para muestra el trabajo realizado en la Universidad Autónoma de Coahuila, mediante la firma del «Compromiso 3 de 3 contra la violencia de género al interior de la UADEC» dónde se establece la pauta para que ningún agresor pueda acceder al poder en nuestra querida universidad.

Esta 3 de 3 es una iniciativa ciudadana, comenzó como el sueño por un México más justo, en el que los agresores no se valgan del poder emanado desde la ciudadanía para atacar todavía más a aquellas mujeres y niños que estaban siendo vulnerados en sus derechos, tales como, el acceso a pensión alimenticia o una vida libre de violencia.

Esta iniciativa fue defendida a capa y espada por Las Constituyentes MX quienes trabajaron en conjunto con elementos clave dentro de la vida política del país llevando esta iniciativa a congresos locales estatales y finalmente a la constitución mexicana misma.

Esas son las ciudadanas que necesitamos que nos representen, mujeres que se interesen no solo por la política sino por los derechos fundamentales de la ciudadanía.

Mujeres capaces de plantarse frente al senado a exigir que se cumpla con los términos de cada iniciativa que tienen congelada y que beneficiaría mucho a la vida pública de las mujeres.

Mujeres pues, como Yndira Sandoval quien, ahora es candidata a Diputada Federal por el Distrito III de Morelos, encabezando a la coalición Fuerza y Corazón por México, conformada por PRI, PAN y PRD.

Pero las feministas la conocemos y sabemos que su curul lleva todos o ninguno de los colores de esos partidos, pues antes de ser política es una mujer feminista, defensora y promotora de los derechos humanos de las mujeres. Su curul será violeta, como su convicción.

Porqué como ella misma lo dice «con las mujeres al frente, y nuestros derechos en el centro» es cómo conseguiremos construir el México digno, que dejaremos como herencia a nuestras hijas e hijos.

 

 

Autor

Leonor Rangel