Washington.- El Grupo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) hicieron este miércoles un llamado conjunto al Grupo de los Veinte (G20) para que se suspenda el pago de la deuda de los países pobres a fin de apoyarlos en el combate a los desafíos que representa la COVID-19.
Es probable que el brote del coronavirus «tenga severas consecuencias económicas y sociales» para los países más pobres, los cuales recurren a la Asociación Internacional de Fomento (IDA, por sus siglas en inglés) del Banco Mundial, indicaron los dos prestamistas multilaterales en una declaración dirigida al G20.
«Con efecto inmediato y de conformidad con las leyes nacionales de los países acreedores, el Grupo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional piden a todos los acreedores bilaterales oficiales suspender el pago de la deuda de los países de la IDA» que soliciten facilidades, añadió.
«Esto ayudará a las necesidades de liquidez inmediata de los países de la IDA para abordar los desafíos que representa el brote del coronavirus y dará tiempo para evaluar el efecto de la crisis y las necesidades de financiamiento de cada país», agregó.
Creado en 1999, el G20 es un foro central para la cooperación internacional en asuntos financieros y económicos. Está integrado por 19 países más la Unión Europea. Los países son Argentina, Australia, Brasil, Reino Unido, Canadá, China, Francia, Alemania, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Rusia, Arabia Saudí, Sudáfrica, República de Corea, Turquía y Estados Unidos.
Los dos prestamistas multilaterales también invitaron a los líderes del G20 a que soliciten al Grupo del Banco Mundial y al FMI que realicen estas evaluaciones, incluyendo identificar a los países con situaciones de deuda insostenible, y preparar una propuesta de acción integral de los acreedores bilaterales oficiales para abordar las necesidades tanto de financiamiento como de alivio de la deuda de los países de la IDA.
Los dos prestamistas dijeron que buscarán apoyo a la propuesta en el Comité de Desarrollo, el comité ministerial conjunto de las juntas de gobernadores del Banco Mundial y el FMI, durante las Reuniones de Primavera programadas para el 16 y 17 de abril.
El Grupo del Banco Mundial y el FMI consideran «imperativo» en este momento ofrecer una sensación mundial de alivio para los países en desarrollo, así como una fuerte señal para los mercados financieros, se indicó en la declaración, la cual añadió que la comunidad internacional daría la bienvenida al llamado del G20 para apoyar esta acción.
En la videoconferencia del lunes de ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20, el presidente del Grupo del Banco Mundial, David Malpass, dijo que es probable que la pandemia de la COVID-19 afecte más a los países más pobres y pidió reforzar el apoyo internacional para estos países.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo en la videoconferencia que «estamos principalmente preocupados por los países de bajos ingresos con problemas de endeudamiento, un asunto en el que estamos trabajando estrechamente con el Banco Mundial». (XINHUA)
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