La Habana.- El gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) iniciaron este jueves en Cuba el quinto ciclo de conversaciones de paz, con miras a pactar un nuevo cese al fuego bilateral temporal y promover un diálogo con la participación de toda la sociedad.
En declaración conjunta realizada en el salón de protocolo Cubanacán en La Habana, los representantes de ambas partes afirmaron que en los próximos días de trabajo se persigue estimular un mayor dinamismo en la agenda para alcanzar resultados concretos.
«Somos conscientes de la responsabilidad histórica que tenemos frente a los colombianos y la comunidad internacional», dijo Gustavo Bell, ex vicepresidente de Colombia y jefe de la delegación del gobierno colombiano.
Agregó que se tienen que «dar pasos decisivos para ponerle fin al conflicto armado y acordar las medidas que impulsen la transformación de Colombia hacia la paz, y la construcción de una sociedad regida por los principios de la solidaridad y equidad».
Bell insistió en la necesidad de estar a la «altura» de las expectativas para acordar una metodología de trabajo, donde la sociedad sea el «actor primordial», y un eventual cese al fuego que permita llegar en paz a las elecciones presidenciales del próximo 27 de mayo.
«Es un proceso que pronostica que con razonable optimismo, podamos tener resultados concretos y favorables en el mediano plazo», consideró el jefe de la delegación del gobierno.
«Con el concurso de todos y la decidida voluntad del ELN, podemos acordar que nos permitan vislumbrar un futuro donde la convivencia pacífica sea lo que rija las relaciones entre los ciudadanos», deseó Bell.
Por su parte, el comandante Pablo Beltrán, cuyo nombre de pila es Israel Ramírez y quien está al frente del grupo de negociadores del ELN, detalló que tras la satisfactoria experiencia de los 101 días de cese al fuego bilateral establecidos anteriormente por las partes, se ha planteado pactar uno nuevo.
Reiteró la necesidad de que la sociedad participe en la construcción de la paz para propiciar transformaciones profundas que cambien la realidad del país sudamericano, así como eliminar la violencia de la política en Colombia.
Beltrán señaló que la nación colombiana atraviesa por un momento «complejo y difícil».
Dijo que enfrenta «grandes dificultades» la implementación del acuerdo de paz suscrito en La Habana hace un año y medio entre el gobierno del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y la ex guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionaria de Colombia (FARC), hoy partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC).
El comandante del grupo armado, único activo en Colombia luego de la desmovilización de las FARC, manifestó su solidaridad con los miembros de la otra guerrilla, con el anhelo de que se superen los incumplimientos y cesen los ataques contra el proceso de paz.
«Pese a esas adversidades, nosotros somos conscientes que el único camino viable para Colombia, para una solución política, es que la vía del diálogo salga adelante. Ninguna adversidad va a hacer que nos levantemos de la mesa», apuntó Beltrán.
Reiteró la inquietud del ELN frente al hecho de que en el último año han crecido un 20 por ciento los asesinatos a líderes sociales en la nación sudamericana, situación que a su juicio configura un «genocidio de la oposición».
Bell y Beltrán agradecieron de manera especial a Cuba por acoger a ambas delegaciones en este nuevo ciclo de conversaciones, luego de que el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, informó en abril pasado su decisión de no continuar como sede y garante de los diálogos.
La decisión de Moreno se debió al impasse entre Ecuador y Colombia por la muerte de tres periodistas ecuatorianos en la frontera común, así como un ataque contra una patrulla militar.
Los jefes negociadores del gobierno y del ELN resaltaron de igual forma el compromiso demostrado por Cuba con la paz de Colombia.
Cuba acogió durante cuatro años a los representantes de las entonces FARC y del gobierno de Colombia en un proceso que concluyó en noviembre de 2016 con la firma de un Acuerdo de Paz, actualmente en vías de implementación.
Este quinto ciclo de discusiones está previsto concluya el próximo 25 de mayo, cuando los representantes del ELN y el gobierno deberán informar sobre lo acordado, así como su decisión de continuar en Cuba o en otro de los países garantes (Brasil, Chile, Venezuela o Noruega) los venideros diálogos de paz. (XINHUA)
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