LOS PRIMEROS CENTROS RELIGIOSOS

CRONISTA DE TORREÓN

Desde el inicio de Torreón, bajo la categoría política de rancho, los habitantes del incipiente centro de población iniciaron la práctica de sus inclinaciones religiosas, para lo cual buscaban donde realizar las mismas, pues desde un principio fueron una y no varias religiones las que se practicaron en esta región. Por tal motivo hemos considerado dar a conocer lo que hasta el momento hemos consignado en algunas obras literarias de nuestra autoría, así como en la de varios historiadores que se han ocupado del tema tan importante, además de interesante.

En un principio los peones que laboraban en el rancho del Torreón, sus necesidades espirituales las satisfacían en las capillas de los ranchos, sobre todo en las parroquias de Viesca y Matamoros, esto al no existir ningun centro religioso en el recién fundado rancho, razón por la que tenían que acudir a donde lo hubiera. La Iglesia Presbiteriana de la Paz tuvo primicia en Torreón, pues se dice que a partir de 1872 un grupo de misioneros se trasladaban de Zacatecas para evangelizar a los primeros habitantes del rancho.

En el año de 1890 se construyó una modesta capilla en donde se oficiaba la misa dominical y con posterioridad, gracias a la donación que hiciera don Andrés Eppen del lote C, Manzana 31 que comprendía un cuarto de manzana, esto en 1890 y para 1893 se inició la recién construida Parroquía de Guadalupe, siendo el padre Prudenciano Villalobos quien ofició la primera misa. La Iglesia Presbiteriana Príncpe de la Luz, fue uno de los primeros centros religiosos, de esta iglesia surgió la Iglesia del Buen Pastor y estuvo en la avenida Juárez número 26 después 1535 poniente.

La primera iglesia bautista inició en el año de 1897, ubicándose frente a la actual Plaza de Armas entre las calles Cepeda y las avenidas Juárez y Morelos. Con posteriorioridad, en el año de 1907, fue inaugurado el edificio de la Iglesia Metodista San Pablo, el cual se ubica en la avenida Morelos y calle Leona Vicario, siendo el edificio de tal templo considerado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia como un monumento histórico de Torreón, siendo en consecuencia un ícono de la arquitectura lagunera.

Después de los templos a que nos hemos referido como los primeros de nuestra gran ciudad de Torreón, se han sucedido un buen número de construcciones en las que se albergaron templos de diversas religiones, pero los aquí mencionados fueron los primeros.