Acumulación de emociones negativas fue detonante en agresión de alumno hacia maestra en secundaria de Ramos Arizpe

 La directora de la Facultad de Psicología de la UA de C, Berenice de la Peña Aguilar, hizo un llamado a mantener una comunicación asertiva con sus hijos para evitar este tipo de hechos violentos

La tarde de este miércoles, un alumno de la Escuela Secundaria General  N° 1 “Rubén Humberto Moreira Flores”, en el fraccionamiento Analco de Ramos Arizpe, Coahuila, agredió con un arma blanca a una de sus maestras, identificada como Patricia Eugenia “N”, de 59 años, cuya salud se reporta estable y fuera de peligro. De acuerdo con testimonios de algunos de sus compañeros de aula, se presume que constantemente el menor de 14 años recibía comentarios de menosprecio por parte de la afectada.

Al respecto, la directora de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C), Berenice de la Peña Aguilar, consideró que la agresión derivó de un cúmulo de emociones negativas que el adolescente originario de Veracruz no pudo canalizar en su momento para evitar que esta situación pasara.

“Cuando hay hechos violentos como el que vimos es debido a la acumulación de emociones, de una diversidad de emociones que no se manejaron en el momento y que ante la acumulación la persona entra en crisis”, mencionó este viernes en entrevista telefónica con El Heraldo de Saltillo.

“Aquí es muy importante que centremos nuestra atención en el manejo de emociones, este lamentable acontecimiento nos tiene que dejar el reto de estar en constante atención de nuestras emociones para saber manejarlas de la mejor manera”, añadió.

Por último, aseveró que es indispensable que el agresor comience una terapia psicológica y de acompañamiento emocional para conocer el estado de su salud mental y saber a ciencia cierta las causas que lo orillaron a llevar a cabo dicha agresión, al tiempo que convocó a los padres de familia a mantener una comunicación asertiva con sus hijos para evitar que este tipo de conductas se replique en otros planteles educativos.

“Es aquí donde tenemos que cuestionarnos como sociedad sobre cómo estamos incluyendo a las personas, cómo acompañamos, cómo acogemos y como somos ejemplo del adecuado manejo de emociones para la resolución de conflictos. Este hecho es alarmante, es lamentable”, externó.

“Se tiene que dar un acompañamiento acorde a la edad, acorde a las circunstancias, no se puede justificar el hecho violento pero sí se le tiene que dar un acompañamiento acorde a las características que está presentando para poder colaborar en mejorar la vida de ese joven”. (OMAR SOTO)