Mínima posesión de tierras y continuidad en educación, principales factores a resarcir en ejidos de Saltillo 

Por medio del programa denominado “Mujer del Campo”, en la que participaron alrededor de 250 mujeres -mayores de 18 años- de 15 ejidos de Saltillo, entre ellos el de Cuauhtémoc, Cuautla, Hedionda, Santa Teresa de los Muchachos, San Juan de la Vaquería y Majada, la Coordinación de Igualdad de Género de la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C) constató que tan sólo el 2.5 por ciento de ellas cuenta con una propiedad, terreno o vivienda a su nombre.

“Los hombres del campo se están yendo a la Industria, son las mujeres las que se están quedando en el campo y no tienen acceso a los recursos porque no son posesionarias de la tierra, y ellas están ahí, ellas son las que se están quedando ahí”, manifestó Magdalena Jaime Cepeda, coordinadora de Igualdad de Género en la “Máxima Casa de Estudios”, durante la ponencia que realizó este miércoles en la Dirección de Desarrollo Urbano de Saltillo.

La académica atribuyó lo anterior al desconocimiento generalizado de las mujeres de esas zonas sobre tenencia legal de la tierra, lo que se buscó combatir por medio de asesoría legal por parte de académicos y estudiantes de la Facultad de Jurisprudencia.

“Siguen creyendo las mujeres que los hombres tienen que ser los propietarios de la tierra, hay que empoderarlas en ese sentido, hacerles saber que tienen derecho”, aseveró la ponente, al agregar que el recurso -equivalente a 70 mil pesos- para el desarrollo del proyecto se obtuvo gracias al Fondo para la Investigación Científica y Tecnológica (FONCyT) del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología.

EDUCACIÓN Y SALUD 

A su vez, en materia de educación, informó que únicamente el 36 por ciento estudiaron hasta la secundaria, ya que -de acuerdo a sus testimonios- es el grado académico más alto al que tienen acceso en sus comunidades. En tanto, 38 por ciento de las encuestadas terminaron la primaria y sólo el 17 por ciento cuenta con estudios de bachillerato.

Sobre su salud, destacó que el 70 por ciento de las saltillenses que participaron “Mujer del Campo” no presentan padecimientos o enfermedades diagnosticadas, número cercano al 75 por ciento de quienes se hacen revisiones médicas periódicas, relacionadas con ginecología, detección de diabetes e hipertensión; mientras que el 40 por ciento aún recurre a remedios caseros o automedicación. Resaltó también que el 60 por ciento de ellas cuenta con seguridad social.

“Queremos que las personas de la sociedad valoren más a las mujeres del campo, que no pensemos solamente como las mujeres que saben cocinar bien, son mujeres que tienen más que dar”, expresó.

GOBIERNOS COMPROMETIDOS 

La académica enfatizó que de la mano de instituciones como la Facultad de Enfermería y el Instituto Municipal de la Mujer en Saltillo, las habitantes de dichos ejidos tuvieron acceso a capacitación y cursos en temas de primeros auxilios, elaboración de mermeladas para fomentar el emprendedurismo, pintura artística como recreación y autocuidado para prevenir hechos de violencia de género.

Por último, Jaime Cepeda hizo entrega del informe de resultados de “Mujer del Campo” a Beatriz Fraustro Dávila, diputada electa por Coahuila; Katy Salinas Pérez, titular del Instituto Coahuilense de las Mujeres;  Lydia María González Rodríguez, directora del Instituto Municipal de las Mujeres en Saltillo y Diego David Fuentes Aguirre, titular de la Dirección de Desarrollo Rural en Saltillo, quienes coincidieron que será de gran ayuda para trazar rutas y políticas públicas en favor de sus protagonistas.

“Este documento que nos estás entregando, va a ser de suma utilidad para todas las políticas públicas que nosotros tengamos como municipio y no nada más dejarlo como una política pública, sino ir más allá; cómo más podemos ayudar a las mujeres para que emprendan. Nosotros vemos a las mujeres del campo y pensamos en comida y no, las mujeres del campo ya no sólo quieren eso, ya están más evolucionadas”, externó González Rodríguez.

“Lo que se pretende con diagnósticos como estos, es decirle al mundo, a las autoridades, ‘así están las mujeres del campo y necesitan esto’, necesitan más apoyo a la educación, necesitan más apoyo cuando son emprendedoras. ¿Por qué la mayoría de los titulares de las tierras tendrían que ser hombres? Porque históricamente las tierras se les daban a los hombres, eso ha ido cambiando pero queremos que cada vez la tenencia de las tierras, las escrituras, lleguen a más mujeres”, agregó Salinas Pérez. (OMAR SOTO)