DE BUENA FUENTE

Coincidir

Mucho gusto me dio saludar este fin de semana en Monclova a Maribel Torres, periodista non, y excelente persona.

También me topé con Ezequiel Aguilera, otro gran comunicador acerero, de amplia trayectoria, con el que guardo buena amistad.

Maribel y un servido trabajamos juntos allá por los años 90s en el periódico Vanguardia de Monclova, bajo la atinada dirección editorial de Francisco Orduña Mangiola.

Anécdotas mil, y años no tanto, pero los tres seguimos en la brega informativa, pues coincidimos en la presentación oficial con Morena, del diputado federal Shamir Fernández, luego de renunciar hace unos días al PRI.

Así nos tocó vivir…

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Extrañan a Paredes

El alcalde de Monclova Mario Dávila es un ávido estudioso de la historia universal, y por algún lado leyó la máxima de que al pueblo se le controla con PAN y circo, y eso es lo que ahora hace.

¿Puede usted estimado lector nombrar una obra insignificante o importante realizada por la actual administración acerera?.

Don Mario salió vano y sonó bofo, tanto que los monclovenses comienzan a extrañar a los ex ediles Alfredo Paredes y Gerardo García.

Y eso es mucho decir…

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Buzos caperuzos

En el PRI coahuilteco, alguien está dejando sin control lo que ocurre al interior de este organismo político.

La renuncia fallida del legislador local Mario Cepeda puede que haya sido obra de un capricho, de un súbito encontronazo, por la designación de la senadora Verónica Martínez, como líder del PRI en Torreón.

Por fortuna hubo control de daños, y se logró regresar al redil al activista lagunero, aunque a un alto costo político.

La reciente salida del diputado federal Shamir Fernández, fue producto de un análisis frio y serio de la situación que prevalece en la región lagunera.

Pero lo preocupante para el tricolor en Coahuila, es que nadie en la dirigencia anticipó el desencantó de Shamir y el enojo de Mario, hasta que dejaron al PRI.

Lo recomendable ahora es que pongan atención en otro diputado federal rebelde, que lo traten con delicadeza, entre algodones, y que lo mimen, porque huele a peligro.

Al tiempo…

Autor

Ulises Salas
Columnista
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