OPINIÓN

EN EL TINTERO

Por

24 abril, 2018

JESSICA ROSALES

“Ánimo”

Los esfuerzos del PRI en Coahuila para no incurrir en el más mínimo error, en actos pudieran meter en problemas la elección federal, parece que no ha tenido eco en todos los servidores públicos.

Funcionarios estatales y algunos municipales que, obviamente militan en este instituto político, en fechas pasadas fueron sometidos a largas charlas con sus superiores en donde se les explicó lo que pueden y no pueden hacer en este periodo de veda por el proceso electoral.

El propio gobernador Miguel Ángel Riquelme ha sido respetuoso de las actividades políticas en la entidad, considerando su mala experiencia en lo local. Y aunque algunas medidas parecieran exageradas, lo cierto es que prefieren no sujetarse a ningún tipo de señalamiento que pudiera poner en riesgo al candidato presidencial.

Previo a la visita en Coahuila de José Antonio Meade Kuribeña, el PRI convocó a mujeres trabajadoras a un encuentro público con el candidato, y se hizo la petición de que se limitaran de asistir mujeres del servicio público, por la simple y sencilla razón de que el evento se realizaría en horario laboral.

Aunque a las titulares de área no se les vio en el evento, sí a las asistentes, secretarias particulares y otras empleadas de gobierno; pero a la que definitivamente no le importó las consecuencias de acudir al lugar en el que se desarrollaba el evento partidista, fue a la Directora de la Oficina para Promover la Igualdad y en Contra de la Discriminación, Lorena Bermea.

Resulta que a esta funcionaria pública cuando se le necesita y se le requiere para algún tema de discriminación está ilocalizable, pero no se hable de temas político-electorales porque la vemos en primera fila.

Obviamente saldrá con la justificación de que pidió permiso y hasta con descuento, probablemente presente un oficio en donde demuestre lo anterior, pero nada tenía que estar haciendo ahí un martes a las 10 de la mañana, porque a esa hora su responsabilidad está en el servicio público.

¿Qué resultados ha brindado al frente de la dependencia? Ninguno, pero eso no ha evitado que siga descuidando su trabajo para participar en este tipo de actividades.

Hablando de la visita de Meade, a la que no le cayó nada en gracia la euforia del candidato de la coalición Todos por México fue a la aspirante al Senado, Verónica Martínez. Claramente se observa en los videos que cuanto el candidato comienza a vitorear “Ánimo” -el slogan de campaña de su compañero Jericó Abramo Masso-, Vero prefiere peinarse el cabello para no levantar la mano junto al candidato.

Difícil tarea tiene Jericó Abramo Maso junto a una candidata que no está dispuesta a subirse al mismo barco y a trabajar para obtener el triunfo.