Barcelona, España.- El cambio de Jack Doohan por Franco Colapinto le ha traído más problemas que soluciones a Alpine.
No solo por el tema deportivo, pues el piloto argentino no ha sumado puntos y ya generó gastos por el accidente en Emilia-Romaña, también por los múltiples ataques y acoso cibernético de parte de algunos seguidores que rompió con la armonía.
De hecho, al finalizar el Gran Premio de España, una multitud que ondeaba la bandera de Argentina se acercó al garaje de la escudería francesa para exigir con un cántico agresivo un auto competitivo para su conductor.
“Se estrelló de inmediato en el primer fin de semana de carreras. Si dijera que estaba feliz, eso sería una mentira. No estoy feliz en absoluto. Ahora tendremos que ver cómo se desarrolla la temporada para él.
Por supuesto, también tenemos que reconocer que Franco es muy joven y está bajo mucha presión de todas las direcciones, no solo de Argentina”, sentenció Flavio Briatore, asesor ejecutivo del equipo y el principal responsable de ascenso de Colapinto esta temporada.
La falta de confianza y de adaptación con el bólido son dos puntos en los que tiene que trabajar el piloto de 22 años si quiere mantenerse en la F1 y no sufrir un despido como su antecesor.
“En este trabajo, tienes que ser capaz de recuperar tu confianza lo más rápido posible. Así que espero que pueda hacerlo rápidamente y volver a la normalida”, puntualizó. (AGENCIA REFORMA)