PREGONERO | Cada día un coahuilense sale por la puerta falsa

Cada día un coahuilense sale por la puerta falsa

La semana pasada una mujer saltillense, de 54 años de edad, que atravesaba por problemas económicos, decidió quitarse la vida en su casa, no sin antes escribir una carta para pedirle perdón a sus hijos por su actuar.

El mismo día, otra mujer, de 69 años, murió en un hospital de Saltillo, luego de haber ingerido días antes una combinación de medicamento con un químico de limpieza. De acuerdo a sus familiares, la casi septuagenaria pasaba por un fuerte cuadro depresivo a causa de otras enfermedades.

Por si fuera poco, otra mujer, de 23 años, murió también en un hospital tras haber ingerido alcohol y medicamento controlado, supuestamente también atentando contra su vida.

Pero esperen, un hombre, de 40 años, también decidió en esta semana que recién terminó salir por la llamada “puerta falsa” –como dice la raza reporteril policiaca-. Este caso fue en Ramos Arizpe, la causa: problemas con el maldito cristal.

Este domingo 10 de septiembre se conmemoró el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, y sí, que a toda madre se ven las redes sociales inundadas con moñitos amarillos como símbolo de que estamos solidarizándonos con esta causa, pero… ¿qué se logra con establecer días conmemorativos, organizar carreras atléticas, ponerse moñitos amarillos o firmar convenios de colaboración interinstitucional (hasta el nombre se escucha rimbombante)?

¿Realmente han surtido efecto esas actividades para prevenir que la raza salga por la ‘puerta falsa?

A nivel nacional el suicidio ha aumentado en los últimos años, de acuerdo con cifras del INEGI, en 2017 la tasa de suicidio fue de 5.3 por cada 100 mil habitantes, algo así como 6 mil 500 suicidios, pero para 2022 la tasa aumentó a 6.3 suicidios por cada 100 mil habitantes, es decir 8 mil 123 en el año.

Los estados con la tasa de suicidios más alta son Chihuahua, Yucatán y Aguascalientes, con tasas de 8.5 a 11 por cada 100 mil habitantes. Por edad, los grupos que más toman la ‘fatal decisión’ son los de 25 a 29, 30 a 34 y 20 a 24, pero llama la atención que 2.1 de cada 100 mil niños de 10 a 14 años decidió quitarse la vida el año pasado.

En Coahuila los datos no son tampoco alentadores, aunque el estado se encuentre fuera del top cinco de entidades con la tasa más alta, pues en lo que va del año se han registrado ya 254 suicidios, siendo la Región Sureste, acá donde andamos Saltillo, Ramos Arizpe, Arteaga, General Cepeda y Parras, la que se lleva el primer lugar de casos.

Es decir, pa’ entender la gravedad del asunto, este año se ha suicidado un coahuilense cada día, pues hasta este lunes han transcurrido 254 días y van 254 suicidios.

El análisis del Observatorio Ciudadano de la Laguna es también interesante y alarmante, porque en el estado se registraron en 2022 más suicidios que homicidios. Coahuila se encuentra entre los estados con menos homicidios del país, 169 murieron a manos de otras personas el año pasado, pero 312 murieron por mano y decisión propia.

Ahora bien, más allá de los moñitos amarillos o las firmas de hombres de saco para combatir el suicidio, está el atender de raíz las diversas causas que llevan a una persona a decidir quitarse la vida, que, aunque se trata de un tema multifactorial, se repiten algunos patrones.

Entre las principales causas están la depresión, los diversos tipos de violencia y el consumo de drogas, en últimas fechas, el cristal.

En el tema de la depresión, de hecho, en el 2022 a nivel nacional el 16 por ciento de las mujeres y el 9 por ciento de los hombres dijeron haberse sentido deprimidos en algún momento.

Por eso es importante que sea desde los principales núcleos en donde se atiendan los problemas cuando comienzan: comunicación en familia, abordar la salud mental desde la educación básica (para todos los alumnos) y formar redes de apoyo con amigos y familiares.

Ah y claro, a los medios también nos toca hacer nuestra chambita, procurando que las notas sobre suicidio no aborden el hecho como una manera de ‘salir del problema’, ni convertir el artículo en el ‘manual del perfecto suicida’, señalando detalladamente la manera en la que alguien se quitó la vida. Menos detalles, que suficiente el traumático evento como para todavía reproducirlo con lujo de detalle.

 

Y no, no se trata de solamente un ‘échale ganas’…

 

 

 

Autor

José Torres Anguiano
José Torres Anguiano
Reportero Multimedia. Periodista de barrio y contador de historias apasionantes.
Premio Nacional de Comunicación "José Pagés Llergo" 2017.
Premio Estatal de Periodismo 2015, 2016, 2017 y 2018.
Premio de Periodismo Cultural UAdeC 2016, 2018, 2021 y 2023.