Resisten el paso del tiempo; en Saltillo, los negocios duran más de cien años

 

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¿Quién no ha probado una taza de Café Oso, acompañada por una pieza de pan de El Radio? ¿Quién en Saltillo no ha disfrutado alguna vez de un cono de Nieve Ramos, o ha comprado alguna herramienta en la Ferretería Sieber? A nuestros antepasados les tocó degustar algunas de las delicias que venden en la Empacadora Alanís, o alguno de los incomparables productos que venden en la Panadería Mena. El Merendero es tan antigüo, que hasta a Benito Juárez le tocó frecuentarlo durante el tiempo que vivió en nuestra ciudad. Esta es la historia de esos y otros tantos negocios que han resistido el paso del tiempo, logrando vivir más de cien años, y los que todavía les faltan.

Café Oso

Empresa con más de cien años, fue don Manuel Zertuche quien heredó el gusto por el café a su hijo, Ernesto Zertuche, y en 1920 inició con el negocio Café Oso. 30 años después, en 1950, las instalaciones ubicadas en la calle de Victoria de la Zona Centro de Saltillo le quedaron chicas a la productora de café y se mudaron al edificio marcado con el número exterior Allende 548, su ubicación actual.

El Café Oso no sólo se vende en Coahuila sino que se distribuye por toda la República Mexicana, llevando su sabor saltillense a las mesas de miles de mexicanos para amenizar una charla o comenzar su día con una buena taza de café.

 

Panadería El Radio

La tradicional Panadería El Radio de Saltillo, cuya sede se ubica en el 227 de la calle Múzquiz, entre Bravo y Rayón, fue fundada en 1920 por don Juan Guzmán, quien la encabezó hasta 1957, para posteriormente pasar la batuta a don Luis Guzmán y sus hijos, siendo el establecimiento que produce pan tradicional más antiguo de Saltillo.

Con las recetas originales de hace más de 100 años, en El Radio, que en la Zona Centro cuenta con otra sucursal en la calle Ramos Arizpe 387, se puede encontrar una amplia variedad de pan como sus famosas empanadas de hojaldre rellenas de jamón y queso, donas de chocolate y azucaradas, polvorones y chamucos, por mencionar algunos.

 

Antigua Ferretería Sieber

Con más de 168 años de operaciones, la Antigua Ferretería Sieber es uno de los negocios más antiguos de Saltillo. Fundada en 1857 en la calle Zaragoza, cerca de Plaza de Armas, por la convicción de Daniel Brainard, proveniente de Estados Unidos, y Santiago Langstroth, originario de Alemania, de crear un negocio enfocado en la ferretería.

Tras el retorno de don Daniel a su país natal y del posterior deceso de Santiago, la Ferretería fue adquirida por el empresario estadounidense Matías Porth, quien invitó como socio a Clemente Sieber; para el año 1873 el establecimiento se conocía como la Ferretería de Porth & Sieber.

Años más tarde, el señor Porth decidió retirarse del negocio y para 1885 quedó como único propietario Clemente Sieber, quien le cambió el nombre a Ferretería C. Sieber y Cía. Tras su deceso, don Pablo y sus hijos de apellido Suess Moore, quedaron como propietarios del establecimiento que hasta la actualidad conserva su nombre.

 

Pan Mena

Este 2025, Pan Mena también llega a su centésimo aniversario ofreciendo el pan de pulque, distintivo de Saltillo. Don Jesús Carlos Mena relata que la receta del pan de pulque que ahí se ofrece, viene de principios del siglo pasado, siendo su abuela doña Dolores Guzmán viuda de Suárez, quien comenzó con la elaboración de este producto que con el paso de los años logró posicionarse en el gusto de las familias saltillenses.

Menciona que en sus primeros años, la panadería estaba ubicada cerca del Santuario de Guadalupe y posteriormente se estableció en la Calzada Madero, donde según comenta, no le auguraban mucho éxito al negocio.

Después de ubicarse cerca del Santuario de Guadalupe, Pan Mena se mudó a  la calzada Francisco I. Madero 1350, Zona Centro, y gracias a su popularidad entre los saltillenses, ya cuenta con más sucursales como las del bulevar Venustiano Carranza 1638, colonia República, y bulevar Isidro López Zertuche 2280, colonia Los Maestros, por mencionar algunas. La panadería, en todas sus locaciones, ofrece una amplia variedad de pan como molletes, empanadas, semitas y trenzas.

 

Nieve Ramos

Con tres barricas llenas nieve en una carreta que era jalada por su burrita Reynalda, don Víctor Ramos Mendoza inició en la colonia Águila de Oro con Nieves Ramos, negocio familiar que este 2025 cumple 100 años de trayectoria.

La receta original de su nieve que se prepara mayormente a base de leche y frutas naturales la compartió con los 11 hijos que tuvo con doña María Lara, ellos continuaron con su tradición. Al crecer, los descendientes de don Víctor y doña María formaron sus familias y comenzaron a mudarse, fue así que Nieves Ramos empezó a venderse en diversos sectores de la ciudad, cuentan ya con más de 160 barricas para elaborar la nieve de limón, melón, coco, mango y nuez que distribuyen en 30 puntos de venta.

 

Botica Recio

De acuerdo con el cronista de Saltillo, Francisco Tobías, Botica Recio abrió sus puertas en el corazón de Saltillo en 1905, justo en la calle Manuel Pérez Treviño 332, su fundador fue don Félix Recio Galindo.

Desde hace más de un siglo, este negocio enfocado en la salud oferta ofrece a los saltillenses  fórmulas médicas, cápsulas, jarabes, infusiones y pomadas. Después de don Félix, sus generaciones descendientes se han hecho cargo de la Botica y sus bisnietos siguen trabajando en el oficio familiar.

En sus Cápsulas Saraperas, Tobías cuenta que la Botica Recio cuenta, desde el 16 de enero de 1908 con la patente 6579 de la “Pomada Eléctrica” que desaparece los callos.

El Merendero de Saltillo

Con más de 185 años en el gusto de los saltillenses, el Antiguo Merendero de Saltillo es uno de los negocios más icónicos de la ciudad y seguramente el más antiguo. Hasta el propio presidente Benito Juárez, cuando vivió en Saltillo, llegó a degustar un rico pan de pulque, cuando caminaba junto a su esposa Margarita Maza hasta su ubicación en la Huerta Los Pilares, desde una casona ubicada en la calle que ahora lleva su nombre, dentro del Centro Histórico, en la que se hospedó  durante un mes en 1864.

Fundado por doña Asunción Quintero Valerio en 1840 y preservado como herencia familiar, en la actualidad El Merendero, famoso por su pan de pulque, se ubica al poniente de Saltillo, en la calzada Francisco I. Madero 1455, Zona Centro y, como desde hace más de siglo, los olores a canela y piloncillo despiertan el antojo de sus ricas empanadas y semitas de quienes transitan cerca de su establecimiento frente al Panteón de Santiago.

 

Alanís Alimentos

En junio de 1920, los hermanos Benjamín, Fidelio, Francisco y Manuel Alanís, originarios de El Cercado, Nuevo León que tenían una pequeña tienda de abarrotes en Ramos Arizpe, decidieron crear una empresa de productos alimenticios enfocada en la elaboración y empaque de productos carnícos como chicharrones, chorizo, salchicha y jamón. Todo sucedió a raíz de un incidente inesperado. En la estación de los Bosques, entre Ramos Arizpe y Saltillo, se descarriló un tren en el que venían dos carros llenos de cerdos. El dueño no hallaba qué hacer con ellos. Se estuvo informando para ver a quién le podían interesar y alguien le sugirió que fuera con los hermanos Alanís. Así lo hizo, y le compraron todos los cerdos para hacer chorizo y chicharrones. Días después, don Nicolás Vonrroson originario de Alemania, se presentó con ellos y se ofreció a enseñarlos a preparar jamones.

Así fue como estos cuatro emprendedores hombres de negocios convirtieron su pequeña tienda de abarrotes en una empresa de productos alimenticios

Fue el 29 de noviembre del referido año que el negocio inició formalmente, primeramente bajo la razón social de Alanís Hermanos, para años después tomar el nombre de Empacadora Alanís S.A de C.V, conociéndose popularmente como Alanís Alimentos.

Tras más de un siglo, con la cuarta generación integrada nuevamente por cuatro hermanos Jorge, Francisco, Javier y Alfredo Alanís Verástegui y junto con un equipo de trabajo de más de 150 personas, la tradición que inició en la calle Zaragoza 941, Zona Centro, continúa con éxito. Alanís Alimentos cuenta también con sucursales en bulevard Moctezuma 1935, Los Pinos; Periférico Luis Echeverría Álvarez 2510, Ciudad Las Torres; además de dos locales en Ramos Arizpe, en bulevar Francisco R. Alanís 3000, Parque Industrial Saltillo-Ramos Arizpe y bulevar Plan de Guadalupe 112 local 3, Zona Centro.

 

Relojería Suiza

De origen francés y suizo, respectivamente, Rosa Pujo y Augusto Nicklaus llegaron desde Europa a la capital de Coahuila en la década de los 80 del siglo XIX, donde decidieron abrir una tienda de relojes y joyería en el cruce de la calle Juárez y Allende del Centro Histórico. Así, en 1886, nació la Relojería Suiza. Tras 20 años de la fundación de este negocio, Augusto comienza a ofertar parte de los locales que integraban la Joyería Suiza y es en 1926 que decide vender por completo al empresario de origen italiano, Juan De Nigris, quien por alrededor de dos décadas encabezó el negocio que, tras su fallecimiento en 1949, para a manos de su viuda María Luis Albricci.

La Joyería Suiza continúa con su vocación original, siendo uno de los establecimientos más longevos en Saltillo, tras cuatro generaciones familiares que mantienen la calidad de sus productos como relojes de alta gama, joyería fina, navajas suizas e incluso lentes de prestigiosas marcas internacionales.

Embotelladora El Carmen

Con la Embotelladora El Carmen, entre 1924 y 1925, don Emilio Arizpe de los Santos comenzó con el negocio de producción y embotellado de refrescos con la marca Néctar y en 1926 obtuvo la franquicia para comercializar y embotellar productos de la marca Coca-Cola en Saltillo y sus alrededores.

En su origen, la Embotelladora, en el Centro de Saltillo, se popularizó entre la comunidad saltillense al convertirse en una importante fuente de empleo y permitir visitas escolares con las que estudiantes locales podían conocer, paso a paso, el embotellado de la marca internacional de refrescos. Hasta la fecha sigue produciendo refrescos y otras bebidas, ahora como parte del grupo ARCA Continental, uno de los embotelladores de Coca-Cola más importantes del mundo.

 

Fábrica de Velas Sainz Cabello

En la calle Castelar del Centro Histórico de Saltillo, perdura la fábrica de Velas Sainz Cabello, que fue fundada por don Francisco Cabello, bisabuelo de los actuales propietarios, Luis Gildardo Sainz y María Lucila Sainz Dávila, quienes continúan al frente del establecimiento donde se pueden adquirir cirios pascuales y veladoras que se elaboran de manera artesanal desde hace 130 años.
Son ya cuatro generaciones las que mantienen viva la llama del legado que inició don Francisco y que, gracias a la calidad de sus productos que son elaborados de manera artesanal, se mantiene en la preferencia de los saltillenses, siendo Semana Santa su período de mayor venta (OMAR SOTO)