La Diócesis de Saltillo, a través de su área de Comunicación Social encabezada por Sergio Marroquín Narváez, dio a conocer el último parte médico sobre el estado de salud del padre Felipe Martínez Flores, párroco del templo de Nuestra Señora de San Juan de los Lagos en Ramos Arizpe, quien permanece hospitalizado en estado grave tras haber sufrido un aparatoso accidente hace casi dos semanas.
De acuerdo con el reporte emitido la noche del pasado sábado 24 de mayo, el sacerdote fue sometido a cuatro complejas intervenciones quirúrgicas, tal como lo habían previsto los médicos, en las regiones del tobillo, muñeca y pelvis. Las cirugías se extendieron durante 10 horas continuas en el quirófano.
A pesar de que las intervenciones se realizaron con éxito técnico, el estado del padre Felipe continúa siendo delicado. “Los médicos lo reportan grave, dicen que los golpes fueron tantos y tan severos que no se explican cómo llegó vivo al hospital”, informó Marroquín Narváez.
El párroco permanece intubado en la unidad de cuidados intensivos, y los especialistas seguirán monitoreándolo de forma constante. Uno de los principales riesgos actuales es la presencia de coágulos, los cuales podrían complicar aún más su recuperación si no son controlados a tiempo.
Se ha señalado que el periodo postoperatorio será crítico, con una duración estimada de 48 horas a partir del lunes 26 de mayo. Durante este tiempo, se evaluará la respuesta del organismo del sacerdote a las cirugías y se mantendrá la vigilancia médica intensiva.
“La comunidad católica de Ramos Arizpe y fieles de la región han mostrado su solidaridad con oraciones y muestras de apoyo a la espera de una evolución favorable del estado de salud del padre Felipe. La Diócesis continuará brindando información conforme se den actualizaciones relevantes” indicó Marroquín Narváez. (EDUARDO SERNA).
