A LA BÁSCULA

El día después de mañana 

Un día después de la realización de la ‘madre de todas las elecciones’, lo que sucedió este domingo en nuestro país, deja mucho, muchísimo material para el análisis en muchos sentidos. Hay que ir desmenuzando de uno por uno cada uno de los hechos, para poder explicar qué fue lo que sucedió.

Un par de cosas tendríamos que destacar, la primera, que el proceso contra todos los pronósticos y la violencia registrada los días previos e incluso en la víspera de la jornada electoral que lo convirtieron en el proceso más sangriento en la historia reciente de nuestro país, pero fue una jornada se puede decir tranquila en todo el país, con hechos muy puntuales en algunas entidades.

La segunda, que de acuerdo con las imágenes que vimos de todo el país, la participación ciudadana se dio como nunca, la gente se volcó a las urnas y en muchos casos tuvieron que esperar horas, dos, tres, cuatro y hasta cinco, para poder emitir su voto, y la gente respondió al llamado que nos hizo México, y aguantaron a pie juntillas el terrible calor con tal de responderle a su país. En todo el país se replicaba lo mismo, filas de gente queriendo votar, una participación ciudadana histórica.

Ahí es donde la puerca empieza a torcer el rabo, porque las cifr4as ofrecidas por el INE a través del PREP con el 93.63 por ciento de las casillas computadas hasta las 17:40 horas de este lunes, indicaba una participación ciudadana de 60.03 por ciento, casi cuatro puntos porcentuales menos que los votantes que acudieron a las urnas en la elección de 2018, y que tuvo una participación ciudadana de 63.42.

La del domingo como nunca en la historia de las elecciones recientes en nuestro país, mostró tanto entusiasmo y responsabilidad de los ciudadanos para cumplir con su responsabilidad, que a la vez es obligación, de ir a sufragar, para responderle a México que nos llamó a todos. Las imágenes fueron las mismas a lo largo y ancho de todo el país, muchísima gente deseando votar, largas filas, que no coinciden con las cifras que nos ofrecen del porcentaje de participación ciudadana.

El resultado en general, tanto en la elección presidencial como para la conformación de las cámaras de senadores y diputados, son diametralmente opuestas con el mal humor social reinante en las calles en la mayor parte del territorio nacional.

Y pongo sobre la mesa un par de botones de muestra: la elección para la senaduría, en Coahuila y en Durango. En el primero de los casos, el ex gobernador Miguel Riquelme y María Bárbara Cepeda realizaron unacampaña intensa, y por más que uno quiera encontrarle la cuadratura al círculo para encontrar una explicación lógica, resulta casi incomprensible que Luis Fernando Salazar y Cecilia Guadiana estén en empate técnico, cuando nunca realizaron una campaña en forma, y en la que el lagunero sostuvo su más fuerte lucha no en las calles contra sus competidores, sino de manera interna para ganarle la primera posición a su compañera de fórmula

Igual sucede en el segundo de los casos con el eventual triunfo de Alejandro González Yáñez –alias Gonzalo Yáñez o ‘El Tirantes’, como guste usted decirle- y Lilia Margarita Valdés, quienes no se movieron más allá de la capital de Durango, y sin embargo superan a la dupla femenina integrada por Gina Campuzano y Gaby Hernández ‘La china’.

En Durango, Morena se llevó los cuatro distritos federales, incluyendo por supuesto el 02, en el que Betzabé Martínez Arango superó al ‘Diamante lagunero’, Cristian Mijares, quien desplegó una intensa campaña a lo largo y ancho de todo su distrito, y goza de una gran popularidad por su pasado pugilístico en el que le dio títulos mundiales a La Laguna. Resulta ‘curioso’ que, en la elección para diputados locales, excepción hecha de los distritos con cabecera en la capital del estado donde la alianza Fuerza y Corazón por Durango se los llevó todos, en el resto de la entidad, Morena barrió en los nueve restantes, entre ellos por supuesto el XIII donde Susy Torrecillas, la esposa del alcalde lerdense, Homero Martínez Cabrera, perdió ante Flora Leal (aunque al parecer este distrito será impugnado).

Para muchísima gente no es normal lo que nos han presentado en los resultados oficiales, con el mal humor social expresado en los últimos años en gran parte del territorio nacional. Y si bien la ahora ex candidata Xóchitl Gálvez reconoció en llamada telefónica el triunfo de Claudia Sheinbaum, ayer en sus redes, deslizó el mensaje de que se podrían presentar impugnaciones, “y lo haremos porque no podemos permitir que tengamos otra elección igual a esta”.

Ya habrá tiempo –y espacio-, para seguir en el análisis, y en el examen de conciencia que también están obligados a hacer los partidos políticos integrantes de bloque opositor, y aceptar el mea culpa de los yerros que seguramente también se cometieron.

Pero esto que pasó, no parece encajar dentro de la normalidad.

 

laotraplana@gmail.com

 

X= @JulianParraIba

 

Autor

Julian Parra Ibarra
Es director del diario digital La Otra Plana y la revista impresa Metrópolis. En cuatro décadas de ejercicio periodístico ha trabajado en diarios como El Norte de Monterrey, La Opinión-Milenio en Torreón, Esto en la Ciudad de México y a.m. en León, Guanajuato entre otros; ha sido conductor en programas de radio y televisión. Es columnista en varios medios impresos y digitales de Coahuila y Durango.
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