Con ponencia, expone historiador Carlos Recio influencia de los Franciscanos en Saltillo

 A través de su ponencia “La Regla de San Francisco: su Relevancia en la Identidad de Saltillo”, el historiador y catedrático de la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C), Carlos Recio Dávila, habló de la influencia que los Franciscanos han tenido en el desarrollo de la capital coahuilense y su identidad ciudadana desde su establecimiento formal en 1591.

“Yo considero que, es muy probable, sin la presencia de los Franciscanos Saltillo no hubiera prevalecido como pasó en Monterrey que se fundó dos veces, Monclova se fundó tres y otras poblaciones que no prevalecieron. Ese binomio que hicieron los Franciscanos con los tlaxcaltecas, particularmente, que poblaron El Valle a partir de 1591, permitió que la ciudad exista”, resaltó.

“Definitivamente su influencia es muy importante. Al llegar a México, los Franciscanos -al igual que los españoles- se distribuyen a lo largo y ancho del territorio que ahora es México. Dominicos, Agustinos y algunas otras ordenes se quedan en el semicentro y los Franciscanos son de los pocos que viajan al norte y particularmente a Saltillo y de Saltillo hasta San Antonio, Texas, Parras, General Cepeda, Monclova, Monterrey”, añadió.

En el evento, que tuvo lugar la tarde de este lunes en el Templo de San Francisco, fundador de la Orden Franciscana, el ponente sugirió que la actitud de respeto hacia los adultos mayores y el sentido de solidaridad característico de los saltillenses, podría ser fruto de que los Franciscanos arraigaron esta actitud con su ejemplo, ya que -de acuerdo a su Orden- debían guardar el Santo Evangelio, obediencia a San Francisco y sus sucesores.

“Desde mi punto de vista, históricamente hay un espíritu de respeto, de obediencia a los mayores y a las autoridades. Es algo de manera natural, creo que todos coincidimos en eso, un espíritu también solidario”, indicó.

A su vez, Recio Dávila apuntó que se tienen registros históricos de que una de las vocaciones de los Franciscanos era la defensa de chichimecas y tlaxcaltecas, quienes padecían del yugo español, al tiempo que señaló que los Franciscanos tuvieron como residencia a la Iglesia de San Esteban, en el corazón de Saltillo.

“Es un tema muy entrañable, muy cercano a nosotros porque tiene qué ver con la larga presencia de los Franciscanos en nuestra ciudad, en El Valle de Saltillo, desde incluso antes de la fundación de Saltillo. Saltillo se funda en 1577, la fecha oficial es esa, pero ya hubo Franciscanos que pasaron por El Valle de la Buena Esperanza, que es el Valle de Derramadero, y por El Valle de Saltillo desde 1568, entonces esta larga presencia ha sido muy efectiva”, platicó.

“La referencia arquitectónica más antigua que existe en la ciudad es el Templo de San Esteban, ahí llegaron los Franciscanos pero realmente está muy transformada, las oficinas de la iglesia son del siglo 19. Si entramos a San Esteban, al crucero lateral, al fondo hay una pequeña capilla, eso era San Esteban con la vista al poniente; ahí hubo dos franciscanos que llegaron en 1591 y que se establecieron en la ciudad como protectores de indios”. (OMAR SOTO)