CÁPSULAS SARAPERAS

 Rubén Herrera

En esta ocasión te platico de un Saltillense por adopción, quien nació en Villa de Cos, Zacatecas, el 10 de marzo de 1888, y a muy corta edad llegó con sus padres, Perfecto Herrera Salazar y Salomé Flores a esta hermosa ciudad de Saltillo. Me refiero a Rubén Herrera Flores.

Siendo un joven estudiante, a la edad de trece años ingresó al Ateneo Fuente, y fue en sus aulas donde conoció a Francisco Sánchez Uresti, maestro de dibujo y quien fuera el impulsor para el acercamiento de Rubén con la pintura y el arte. De manera rápida, el Saltillense mostró sus dotes para la pintura, por lo que a la edad de 20 años fue acreedor de una beca para sus estudio artisticos en Europa por parte del gobernador de Coahuila, Miguel Cárdenas. Estando en el viejo mundo logró ser admitido como alumno del maestro Antonio Fabrés.

Al mostrar sus dotes en la pintura, Rubén Herrera fue aceptado en la Academia de Bellas Artes de Francia y en la Academia San Lucas, esta última con ubicación en Roma, Italia. Todo esto entre los años de 1908 y 1910, pues cuando alcanzaba su plenitud como estudiante en Europa, estalló la Revolución Mexicana, motivo por el cual la beca que le otorgaba el Gobierno de Coahuila le fue suspedida.

Para poder continuar con el pago de sus estudios y demás gastos, el joven Saltillense realizaba retratos a quienes paseaban por Roma, para con sus ventas poder solventar sus gastos, logrando terminar sus estudios en el año de 1913, allá en Roma, mientras acá, el Gobernador Carranza se levantaba en armas, desconociendo al usurpador Huerta, proclamando el Plan de Guadalupe y dando inicio a la Revolución Contitucionalista.

Con el triunfo de Carranza en 1917, siendo este Presidente de la República, el Saltillense Rubén Herrera fue beneficiado, por un breve tiempo, con un beca gubernamental. Cuando todo parecia que era alegría, en el año de 1920, después de contraer nupcias con la italiana Dora Scaccioni, cuando el Presidente Carranza le extendió una invitación a Herrera para que regresará a México a realizar algunas obras artisticas en la Ciudad de México, una vez más, nuestra revolución se atavesaría en su vida, pues Carranza ese mismo año sería asesinado, regresando así a nuestra hermosa ciudad de Saltillo.

El 20 de septiembre de 1920 abrió las puertas de la Academía de Pintura de Saltillo, siendo una de las primeras escuelas de pintura en el norte del país, institución que tuvo una vida relativamente, corta pero muy fructifera, pues a pesar de que fue clausurada por falta de recursos económicos en 1931, varios de sus alumnos fueron premiados en la Exposición Interamericana de Sevilla un año antes, evento en el cual Don Rubén Herrera recibió la medalla de oro.

Fue padre de dos hijos,  el mayor nacido aquí en Saltillo en 1923, de nombre Mario Felipe; y María Romana, nacida en Italia en el año de 1928.

El legado del Maestro Rubén Herrera es grandisimo, tanto que la cultura, el arte y la pintura de nuestra hermosa ciudad de Saltillo no sería posible sin su vida y dedicación.

Su esposa e hijos inauguraron el Museo Rubén Herrera en el año de 1971, en el mismo recinto que fue hogar de ellos, en el cruce de de las calle de Juárez y General Cepeda, lugar el cual hoy podemos visitar.

Hoy la escuela de artes plasticas de la Universidad Autónoma de Coahuila, lo honra al ser llamada “Rubén Herrera”.

Definitivamente la vida y obras del pintor Saltillense Rubén Herrera es algo muy de Saltillo y que vale la pena presumir.

 

Autor

Francisco Tobías
Francisco Tobías
Es Saltillense*, papá de tres princesas mágicas, Rebeca, Malake y Mariajose. Egresado de nuestra máxima casa de estudios, la Universidad Autónoma de Coahuila, en donde es catedrático, es Master en Gestión de la Comunicación Política y Electoral por la Universidad Autónoma de Barcelona, el Claustro Doctoral Iberoamericano le otorgó el Doctorado Honoris Causa. Es también maestro en Administración con Especialidad en Finanzas por el Tec Milenio y actualmente cursa el Master en FinTech en la OBS y la Universidad de Barcelona.
Desde el 2012, a difundido la historia, acontecimientos, anécdotas, lugares y personajes de la hermosa ciudad de Saltillo, por medio de las Cápsulas Saraperas.
*El autor afirma que Saltillense es el único gentilicio que debe de escribirse con mayúscula.
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Es Saltillense*, papá de tres princesas mágicas, Rebeca, Malake y Mariajose. Egresado de nuestra máxima casa de estudios, la Universidad Autónoma de Coahuila, en donde es catedrático, es Master en Gestión de la Comunicación Política y Electoral por la Universidad Autónoma de Barcelona, el Claustro Doctoral Iberoamericano le otorgó el Doctorado Honoris Causa. Es también maestro en Administración con Especialidad en Finanzas por el Tec Milenio y actualmente cursa el Master en FinTech en la OBS y la Universidad de Barcelona. Desde el 2012, a difundido la historia, acontecimientos, anécdotas, lugares y personajes de la hermosa ciudad de Saltillo, por medio de las Cápsulas Saraperas. *El autor afirma que Saltillense es el único gentilicio que debe de escribirse con mayúscula.