Servirá para fortalecer acciones en favor de zonas naturales protegidas de entidades participantes
Con el objetivo de fortalecer la colaboración entre estados del norte del país para la protección de las zonas naturales protegidas, la secretaria de Medio Ambiente de Coahuila, Susana Estens de la Garza, informó que existe un proyecto para la creación de un corredor ecológico y biocultural que, en su primera etapa, comprenderá a Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, con la posibilidad de que posteriormente se sumen Sonora y Chihuahua.
El proyecto, que también busca integrar esfuerzos para fomentar la conservación de especies emblemáticas como el oso negro y el jaguar, iniciará su fase de planeación en 2026, detalló la funcionaria estatal.
Estens de la Garza destacó que el corredor podría abarcar millones de hectáreas, desde la frontera norte, en Maderas del Carmen, hasta las zonas naturales de Arteaga, conectándose con Nuevo León y Tamaulipas.
“Son millones de hectáreas lo que estaría abarcando, desde la frontera, desde Maderas del Carmen y esas áreas naturales protegidas, baja por todo el estado, también lo que corresponde Arteaga y se estaría comunicando con Nuevo León y Tamaulipas, que es donde hay más jaguar. Todo el próximo año va a ser de preparación prácticamente, son proyectos que requieren de mucha coordinación no solamente entre los gobernadores sino entre las instancias que estarían fondeando un proyecto de esta envergadura”, indicó.
“Esta es una gran posibilidad de que exista este corredor, ya que si observamos el mapa de Coahuila en relación a sus áreas naturales protegidas, tanto de carácter estatal como federal y municipal, vemos que hay como un rompecabezas que traíamos de estar uniendo con este corredor”, comentó.
Añadió que 2026 será un año de preparación y coordinación interinstitucional, dado que se trata de un proyecto de gran escala que requerirá la participación de los gobiernos estatales, universidades y organismos internacionales de financiamiento.
Asimismo, señaló que el proyecto se denomina biocultural, pues además de conservar la biodiversidad, respetará las comunidades locales y su identidad. “Se le llama cultural porque es siempre respetando la esencia de las comunidades que viven, que se han establecido a lo largo de este corredor, pero también es un corredor biocultural, respetando la biodiversidad y estos sitios”, concluyó. (OMAR SOTO)
