Habla de sexualidad con tus hijos y detecta alertas de abuso

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13 mayo, 2024

Guadalajara, Jalisco.- Si usted nota que su hija presenta cambios de humor, trastornos del sueño, infecciones en los genitales no lo dude y atienda el caso lo más pronto posible. Podría estar ante un caso de abuso sexual.

“Existen signos y síntomas, algunos relacionados a cuestiones físicas y otras a conductuales”, explicó Gabriela Rojas, coordinadora del área de Prevención de la Fundación PAS.

“Los signos físicos podrían ser problemas para dormir, cambios repentinos en el apetito, dolores de cabeza o de pancita, que sean recurrentes, y que no se logren disminuir. Si ya hay una violación directa: infecciones vaginales, enfermedades o infecciones de transmisión sexual, accidentes relacionadas con la pipí o popó, dolores, fluiditos de color diferente a los esperados; dolor o sangrado al defecar u orinar».

En cuanto a la conducta, sostuvo, la víctima podría mostrarse distraídos y que tengan pensamientos relacionados con el hecho de que su cuerpo sea sucio o malo.

“También miedo a ciertas personas o lugares, negar hablar de un secreto que comparte con otra persona, generalmente revelan el problema a través de repeticiones de juegos que tengan contenido sexual, escribe o dibuja cosas con contenido sexual”, añadió.

“Puede ser que aparezcan con dinero o juguetes, mostrar comportamientos de lenguaje hipersexualizados”.

Rojas recomendó hablar empezar a hablar del tema de la sexualidad desde el preescolar, particularmente en lo que respecta al cuerpo y la proximidad de las personas.

“Posteriormente hablar de autonomía y que los niños y las niñas se hagan cargo de su propio cuerpo; también sobre los lugares donde se puede mostrar el cuerpo desnudo y semidesnudo.

“Hablar siempre sobre los tipos de caricias que se pueden obtener: por ejemplo, ¿un maestro puede tocar? o ¿una mamá puede tocar la pancita? El maestro puede tocar (no en partes íntimas), pero no acariciar; una mamá puede palpar porque hay dolor, pero no puede acariciar genitales. Si te lastimaste en la bicicleta el pene o la vulva, te puede revisar un doctor pero nunca solito”.

Consideró que hablar del abuso sexual, propiamente, podría ser a partir de los 8 años, previa charla sobre la identificación de personas de confianza o cómo evitar guardar secretos que los puedan poner en peligro.

Indicadores de abuso sexual

+Ropa interior rasgada, manchada o con sangre.

+Dificultad para caminar o sentarse.

+Irritación, picor, dolor o lesión en la zona genital o anal.

+Infecciones de transmisión sexual.

+Infecciones del tracto urinario u orales.

+Precocidad.

+Conducta de la víctima.

+Temor al contacto o a los acercamientos físicos.

+Temor exagerado a un adulto.

+Conducta agresiva, destructiva o excesivamente sumisa.

+Depresión.

+Intentos de autoagredirse.

+Problemas alimenticios: muy glotón o pérdida de apetito.

+Bajas calificaciones escolares.

+Inasistencias escolares frecuentes e injustificadas.

+Inhibición para jugar.

+Tiende a beber alcohol o consumir psicoactivos.

+Timidez exagerada.

Medidas de prevención

Enseñar a los niños que nadie (conocidos o desconocidos) puede tocar su cuerpo ni que hagan caricias que lo incomoden.
Si sus hijos le manifiestan que hay personas que lo molestan, no lo desestime y ponga atención a su comportamiento y tome en cuenta los indicadores antes señalados.
Procure no perder de vista a sus hijos en eventos masivos: paseos, fiestas, plazas comerciales o actividades fuera de su hogar.
Inculcar a sus hijos a no aceptar regalos a cambio de una condición o petición.
Informarle a su hijo la importancia de que nadie puede tomarle fotografías sin su consentimiento.
Vigile los sitios web que visitan sus hijos, así como sus amigos en las redes sociales.

¿Qué se debe hacer?

+No bañar al menor.

+Guardar las ropas que traía puestas.

+Marque al 911 y relatar el hecho.

+Presente la denuncia

+Lleve consigo acta de nacimiento del menor y copia de identificación del responsable del menor.

(AGENCIA REFORMA)