Voto fiel, racional y estratégico en Coahuila
En las elecciones del 4 de junio en Coahuila, participarán tres tipos de electores: los fieles, los racionales y los estratégicos.
Un votante fiel, también conocido como votante duro, es alguien que vota por la ideología o el partido con el que más se identifica o vincula.
De acuerdo con una encuesta realizada por Demotecnia en abril, el PRI y Morena tienen una identificación partidaria similar, con un 33% y un 28% respectivamente. El 5% se identifica con el PT y el 4% con el PAN. El resto de los partidos fluctúa entre el 0% y el 1%.
Ahora bien, ¿cómo se determina el número de votantes fieles? Una manera es sumando a las personas movilizadas por cada partido para actividades internas o de interés político fuera de los procesos electorales recientes.
En el proceso de revocación de mandato realizado en abril de 2022, Morena y el presidente recibieron el respaldo de 335 mil 192 votantes.
Mientras tanto, más de 503 mil electores depositaron su voto en las elecciones de febrero de 2023 para elegir al candidato de la coalición PRI-PAN-PRD.
Como se puede observar, el voto duro representa una proporción significativa. Además, al vincularse con las estructuras partidistas, permanecen inmunes a la propaganda electoral. De hecho, en una encuesta de Reforma publicada en mayo, solo el 11% afirmó que la campaña había influido en su decisión de voto.
Ahora centrémonos en el votante racional o de interés. Aquí se sitúan aquellos que evalúan las propuestas de los candidatos y su capacidad para responder a sus intereses.
Cuando Demotecnia preguntó: ¿Quién cree que defendería mejor los intereses de usted y su familia? El 39 % consideró que Manolo Jiménez Salinas, abanderado de la coalición PAN-PRI-PRD; 24 % a favor de Armando Guadiana Tijerina, aspirante de Morena; 12 % por Ricardo Mejía Berdeja del PT; y, 3 % para Lenin Pérez Rivera de la alianza UDC-PVEM.
Asimismo, Reforma formuló dos preguntas: ¿Quién ha presentado las mejores propuestas? ¿Quién tiene la mayor capacidad de gobernar? 45 % y 49 % respondieron que el candidato de la coalición PRI-PAN-PRD; 21 % y 25 % apoyaron a Morena; 11 % y 13 % coincidieron con el abanderado del PT; y, 5% y 4% dijeron que la coalición UDC-PVEM.
Estas interrogantes adquieren relevancia a medida que la política se ciudadaniza y los íconos ideológicos se desvanecen. En Coahuila, según las encuestas, entre un 25 % y 30 % de los votantes no se identifican con un partido político.
La frase “Yo voto por el candidato, no por el partido” obliga a los partidos a seleccionar mejores candidatos y presentar propuestas que sean de interés para los votantes.
Finalmente, el 4 de junio se emitirá un porcentaje indeterminado de votos útiles o estratégicos debido a la existencia de más de dos candidatos compitiendo. Esto ocurre cuando los votantes consideran que su candidato tiene escasas posibilidades de triunfo, por lo que eligen su segunda opción para no desperdiciar su voto.
En abril, Enkoll realizó una encuesta en la que preguntó: Si su candidato no tuviera posibilidades de ganar, ¿cuál sería su segunda opción para Gobernador de Coahuila? De los encuestados que apoyan a Armando Guadiana, el 40 % dijo que Manolo Jiménez, el 22 % Ricardo Mejía y el 18 % Lenin Pérez.
Por el contrario, el 42 % de los simpatizantes de Ricardo Mejía votaría por Morena, el 18 % por la coalición UDC-PVEM y el 16 % por la alianza PRI-PAN-PRD.
Es interesante destacar que, aun cuando se está llamando a no desperdiciar el voto o a declinar, esto no significa que todos esos votos favorecerán a un candidato en particular, según indican las encuestas.
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