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Escasez de chips llegaría a su fin en enero

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13 noviembre, 2021

Monclova.- Por la escasez de chips en la industria automotriz, de 20 a 30 empresas de la región Centro realizan paros técnicos para evitar reajuste de personal, comunicó Alejandro Loya Galaz, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).

Resaltó que tiene información confiable de que para finales de enero terminará el problema de suministro de chips para la industria automotriz, porque los proveedores estarán completando el abasto que se requiere, esperando en febrero la reactivación de las empresas.

Comentó que hace un mes acudió a una reunión internacional de las automotrices y explicaron que la fabricación de chips nunca dejó de realizarse, pero el lote que surtían a las automotrices fue vendido durante la pandemia de covid-19, luego que la industria de automóviles paró su producción.

Al reanudar actividades las empresas automotrices, el proveedor no tenía chips suficientes porque vendió y comenzó a surtir a la industria de confección de respiradores y otros artículos, explicó, y para abastecer el monto requerido tardan un año.

“Sólo el 10 por ciento de la producción de los fabricantes de estos chips es para la industria automotriz, ellos tenían la producción lista, pero al parar las compañías de automóviles, los proveedores colocaron el lote reservado a otros fabricantes, cuando la industria pidió sus componentes, no había”, describió.

Así que la estimación es que para enero contará la industria con este insumo para la producción de coches y comenzará la reactivación en este rubro y la jornada laboral regresará a la normalidad, afirmó el dirigente de Canacintra.

Las empresas del ramo aplican paros técnicos secuenciados, por ejemplo, jornadas reducidas, donde trabajan cuatro días y descansan tres, para evitar afectar lo menos posible la fuerza laboral con un reajuste, externó.

Puntualizó que la industria automotriz está bien porque hay la demanda de vehículos, lo que sucede es un desfase del surtido de los complementos que necesitan para continuar la producción y obedece a decisiones que, en su momento, por cuestión de la pandemia, tomaron los directivos. (CRISELDA FARÍAS | INFONOR)