CAFÉ POLÍTICO

 

RAMÓN BETANCOURT 

ANAVEL FERNÁNDEZ

Mientras las tribus de Morena en Gómez Palacio continúan agarradas de la greña, la candidata del PRI a la alcaldía Anavel Fernández Martínez sigue avanzando, pian pianito, por relevar a la presidente municipal Leticia Herrera. Huelga decir que Anavel ha destacado una vigorosa campaña desde el primer día en que dio inició la justa comicial. Y no ha fallado en tocar puerta por puerta haciéndoles saber a los vecinos su plan de trabajo. Nos confirman que le ha ido muy bien al grado de que propios y extraños coinciden en que su campaña ha repuntado sensiblemente, máxime y en virtud que su principal oponente, Vitela Rodríguez, no tiene para cuando empezar a justo 15 días de que terminen las campañas y que será el día miércoles 29 de mayo. Es decir, si antes los morenos gritaban a los cuatro vientos que ganarían de calle la elección, ahora esos comentarios alegres han desaparecido ya que ven lejana una victoria que antes aseguraban, traían en la bolsa.

 

LA MARCA YA NO VENDE

A Marina no la han dejado sentarse en paz en la candidatura. Es el fuego amigo de su propio partido el que le ha puesto piedras en el camino. Ello lo ha sabido aprovechar Anavel a las mil maravillas. Por cierto, me pregunto: ¿Por qué se le ha venido complicando la elección a Morena en Gómez Palacio? Por las consideraciones siguientes: 1) La judicialización del proceso interno se le ha complicado a Marina Vitela. Y vaya que no ha empezado campaña como Dios manda. Quizá no aparezca en el debate. 2) Es fecha que Morena no logra consolidar a Vitela como candidata oficial. Ello es muy serio. 3) La impresión de las boletas electorales no se ha hecho en virtud de que hasta este miércoles 15 no hay candidatos de Morena, al menos en Gómez Palacio.  4) Ahora bien, cuando el hoy presidente Andrés Manuel López Obrador ganó la elección el domingo1 de julio de 2018, arrastró a diputados federales y senadores de su partido y los hizo llegar al Congreso de la Unión. Hubo dos candidatos que estaban detenidos en Ceresos del país, y así ganaron la elección. El exalcalde José Ángel Pérez no tocó una sola puerta, no recorrió ni 100 metros de campaña, no gastó un solo peso, y así ganó. Él, en un bar, cuando le dijeron que había ganado, no lo creía. Brindó de más. 5) Así la marca AMLO se vendió muy cara, se vendió muy bien. 6) Caso contrario sucedió con los candidatos de Morena a alcaldes ya que solo el 19 por ciento, ganaron esa elección. 7) Es decir, la marca no llegó hasta abajo. 8) Y si a lo anterior le sumamos que según encuestas de Excelsior y Universal (y no son prensa “fifi”), López Obrador en el mes de abril perdió 12 puntos de popularidad. En este mes le auguran una caída similar. Es decir, hoy día 15 habría perdido ya seis puntos porcentuales más para llegar a 18 menos. O sea, la marca se debilita. 9) Con ello quiero decir que los candidatos de Morena Marina Vitela (Gómez Palacio), Ulises Adame (Lerdo) y Otoniel García (Durango), no la tienen nada fácil, sino todo lo contrario. 10) Dadas estas consideraciones y toda vez que Anavel Fernández ha desplegado una importante e intensa campaña político-electoral, no es ilógico que se alce con la victoria. Al menos no sería sorpresa. 

 

“MATAMOROS DE LOS BALAZOS”

Por el lado de “Matamoros de los Balazos”. Mote que le pusiera la gente a su ciudad allá en los 70’s por el siniestro, aciago, nefasto, sombrío y lúgubre gobierno municipal del entonces alcalde Jesús Contreras Pacheco (a) “El Huevo”, “El Cacique”, “El Apóstata”. Ok. Al que le dieron gas por trácala fue al jefe policiaco de Matamoros, Jesús Leija Peña. Según regidores de todos los partidos coinciden en señalar que el hoy defenestrado además de cometer toda laya de trapacerías y corruptelas, además se quedaba con el dinero de las multas que la corporación aplicaba por faltas al Bando de Policía y Buen Gobierno. Se habla de cientos de miles de pesos que el pícaro Chuy Leija no ingresó a la tesorería municipal. Y ello es robo en despoblado. Por cierto, con el cese de Leija ya van 6 los corridos por el alcalde Horacio Piña que ha dicho que no permitirá que en su equipo de trabajo haya malos elementos, esos que únicamente van a enriquecerse al amparo del poder. Bien por “Lacho” Piña, que les ha puesto la muestra a sus pares (alcaldes) de Torreón, Jorge Zermeño; y de Madero, Jonathan Ávalos ya que en lugar de que estos apliquen correctivos cesando a pésimos y corruptos colaboradores, los premian sentando grave precedente de que cada funcionario puede hacer lo que mejor le plazca.

 

GRAFFITERO NUMERO 1

En otro orden de ideas. Al que le tundieron con todo fue al graffitero número 1 de la ciudad, Elías Agüero, que cobra como Director del Instituto Municipal de Cultura y Educación (IMCE). Ayer en la comparecencia de este funcionario los ediles le criticaron que desde que llegó Elias al IMCE, bajó sensiblemente los resultados de programas y acciones y todo porque la chamaba le importa un comino. Y es que al decir de sus colaboradores, casi no va a la oficina. Mire Usted; en el primer trimestre se programaron 130 coordinaciones artísticas, pero sólo realizaron 36 equivalentes a un 28%. El IMCE programó una asistencia para que acudieran a los eventos 12 mil personas, pero solamente acudieron 3,774 lo que equivale al 31% en el primer trimestre. En cuanto a la capacitación Agüero programó 4 capacitaciones artísticas y solo se realizó una de cine en colaboración con otra entidad, lo que equivale a un 25% de la meta trimestral. A Agüero Díaz Durán no se le ven ganas de trabajar, de dar buenos resultados, de cumplirle a la ciudadanía. Quizá, embriagado con la política indolente, apática y desdibujada de Jorge Zermeño, esté aprovechando la coyuntura para hacer y deshacer a su antojo. Estaremos pendientes.

 

Autor

Ramón Betancourt
Columnista