COMO DECIA MI ABUELA

“El que sirve a dos amos…”

Cuando era más joven mis dos aficiones me dieron la oportunidad de experimentarlas, el canto en un grupo de trova y canto nuevo llamado La Trinca; las comunicaciones en la radiodifusora “Radio Concierto”. Pero además estaba por ingresar a la carrera de leyes en la Facultad de Jurisprudencia por lo que mis padres me pidieron elegir una sola para así no descuidar mis estudios. Cuando se lo comenté a mi abuela, con un nudo en la garganta, ella me dijo: acuérdate hijita que “el que sirve a dos amos con alguno queda mal”, por lo que decidí dejar la radiodifusora en la que solamente grabé tres cápsulas acerca los expositores de la trova, y me ahondé en una de las actividades que más satisfacciones me ha brindado, el canto, junto con mis compañeros del grupo La Trinca.

Querer quedar bien en la política y en el feminismo es definitivamente servir a dos amos y con alguno quedar mal. Por lo menos eso es lo que veo de las mujeres que dicen impulsar el feminismo, que creen en los postulados y la agenda feminista pero que al llegar al poder tristemente vemos cómo traicionan esos postulados y esa agenda por los intereses políticos de unos cuantos, o de unos muchos si recordamos que el capitalismo y el machismo sirven ambos a un solo amo el patriarcado.

Cuando las mujeres dicen formar parte de la lucha feminista pero incluyen y defienden a personas nacidas como hombres que se identifican como mujeres,  y los toman como sujetos políticos del feminismo, caemos en cuenta que o no se está entendiendo ¿qué es el feminismo? o se está tergiversando su contenido para beneficiar a otros intereses.

Puntualicemos: la lucha feminista es la lucha contra toda forma de discriminación y violencia contra las mujeres, por el hecho de nacer mujeres.

Esta violencia se fundamenta en establecer que un sexo es más fuerte y por lo tanto tiene más derechos que el otro y ejerce poder sobre el otro, es decir los hombres discriminan y oprimen a las mujeres por el hecho de nacer mujeres.

Si este planteamiento es así, entonces ¿cómo un hombre nacido hombre que luego se identifica con el género femenino y todo aquello que la sociedad culturalmente le ha impuesto a la mujer por su sexo, puede pertenecer al feminismo? Esto solo es el machismo disfrazado tratando imponernos qué es una mujer, cómo se debe ver, quién puede ser llamado mujer y quién no puede ser llamado mujer; de nueva cuenta el patriarcado ejerciendo violencia machista, la misma violencia que vivieron nuestras abuelas o nuestras bisabuelas cuando se les dijo cómo tenían que ser para ser buenas mujeres, para ser buena mujer ahora tengo que ser llamada mujer cis para que se me distinga de las mujeres trans, ¿no me pueden llamar simplemente MUJER?

Quienes llegan a la política y abogan por el trabajo de la mujer y después hablan de trabajo sexual son otras personas que o están bastante confundidas acerca de los postulados feministas o tienen otros intereses como lo he mencionado antes, puesto que no existe tal cosa como el trabajo sexual, ya que, un trabajo debe ser digno y procurar la realización no solo laboral sino también personal de quienes se enrolan en la actividad.  ¿Qué expectativas de crecimiento laboral tiene una prostituta? ¿Cuál es esa dignidad que existe en un trabajo donde a cambio de dinero una persona puede hacer de ti lo que quiera no solamente humillarte y vejarte sino incluso acabar con tu vida?

La prostitución no es un trabajo, la prostitución es trata de personas, es una forma de esclavitud sexual muy rebuscada muy moderna que nos quieren disfrazar y vender con el pretexto de que somos libres y de que podemos capitalizar nuestros cuerpos.

Y hablando de capitalizar nuestros cuerpos los vientres de alquiler son un tema que también me ocupa. No existe tal cosa como un vientre de alquiler porque no somos objetos somos personas ¿a quién se le ha ocurrido rentar a una persona para realizar cualquier cosa?

¿No nos parece monstruoso que tras una compensación económica una persona decida tener todos los riesgos y las consecuencias que un embarazo puede acarrear solo por un intercambio de dinero,solo por satisfacer un deseo egoísta de alguien más de ser «mamá»?

¿Quién sería capaz de rentar a su hermana o a su hijo o hija para realizar alguna actividad? si lo vemos en estos términos, ¿realmente existe algo como la maternidad subrogada o es solo un nombre que le damos para blanquear la explotación de la capacidad reproductiva de las mujeres?

Cuando veo mujeres en la política defendiendo estos conceptos y mencionando que son feministas y que lo hacen para incluir a todos los tipos de mujeres, siento que se me revuelve el estómago.

Estas mujeres políticas y feministas sirven a dos amos y siempre le quedan mal al feminismo.

Son unas cuantas, solo unas pocas las que buscan de verdad impulsar una agenda que tenga bases del pensamiento filosófico feminista. Y son a estas mujeres a quienes les apuesto para el próximo periodo, esperando que sirvan al feminismo aunque sea la única vez que puedan llegar a un encargo público respaldadas por un partido. Porque serán ellas quienes marcarán la pauta para la nueva generación feminista que llegará impulsada no por un poder político no por un partido o por unos cuantos sino por toda la fuerza ciudadana de las feministas para la defensa de las mujeres.

Como decía mi abuela “el que sirve a dos amos, con alguno queda mal” esperemos de verdad que no les queden mal a las mujeres.