CUANDO COMENZAMOS A RECONOCER NUESTRO VALOR, DEJAMOS DE DAR DESCUENTOS

Una parte esencial del liderazgo de vida consiste en reconocer que somos valiosos, que tenemos la capacidad de generar contribución y de aumentar nuestra autoestima.

Cuando no sabemos darnos el reconocimiento por lo que hemos hecho, nos sentimos personas que carecemos de valor. Necesitamos tomar consciencia de que el valor que percibimos en nosotros, es directamente proporcional al beneficio y la contribución que generamos hacia nosotros mismos y hacia quienes nos rodean.

Cuando no sabemos lo que valemos, comenzamos a dar descuentos, esperando que los demás nos acepten. Esos descuentos llevan como trasfondo el pensar que somos menos, y creer que, si nos ocupamos de resolver la vida de los demás dejando de lado nuestra propia vida y nuestros sueños, podremos ser aceptados y valorados. Ésto provoca que no nos sintamos seguros, ni fuertes y sin confianza para lograr nuestros más grandes anhelos; y que exijamos al otro que construya lo que es nuestra responsabilidad construir.

Una de las mayores dificultades para creer en nosotros y en nuestro valor es creer, erróneamente, que ante un nuevo reto vamos a empezar desde cero. Cuando en realidad comenzamos desde la experiencia, la experiencia de los logros del pasado.

¿Cuántas veces has salido adelante de un reto similar? ¿Cuántas veces has enfrentado dificultades, demostrado valor y control de tí mismo? ¿Qué hiciste que marcó la diferencia?

En estas preguntas puedes encontrar tu stock de habilidades, de creencias poderosas, de actitudes y de acciones que ya has generado y que puedes volver a utilizar para volver a comenzar. Al conectar con esas respuestas, te das cuenta de que, en realidad, ya tienes gran parte del camino recorrido.

A través de diferentes dinámicas de Programación Neurolingüística podemos traer esos recursos al momento presente y proyectarlos al futuro para el logro de nuestros objetivos.

Es muy importante hacer este trabajo de introspección y tomar conciencia del valor que tenemos, de recordar nuestras fortalezas. Entonces, podremos aumentar nuestra percepción de valía y generar relaciones sanas, poderosas y contributivas.

Toma consciencia de que tienes muchas experiencias que te han proporcionado grandes habilidades y sabiduría, y que puedes acceder a ellas en cualquier momento que lo necesites, porque ya están integradas en ti como parte esencial de tu ser.

Entonces, ¿tú ya sabes cuánto vales? Reconoce tu valor para que dejes de dar descuentos y para que dejes de actuar sólo para tener la aprobación de los demás.