COMO DECÍA MI ABUELA

Dos cabezas… 

En la secundaria elegí el taller de cocina creyendo que se me iba a dar fácil, sin embargo, para aprobar el taller no sólo debíamos cocinar, además de eso, presentábamos trabajos de teoría de economía doméstica y bordado. Cuando estaba más enredada con mi bordado de punto de cruz, mi abuela llegó a ayudarme y enseñarme una técnica para facilitar el trabajo, “dos cabezas piensan mejor que una”, me dijo, mientras tomaba el otro extremo de mi mandil y comenzaba a bordar las “x” en el patrón de cuadros de la tela.

El mes de marzo terminó, pero las actividades del movimiento feminista siguen, independientemente de las fechas. Mientras que, para algunos, el feminismo sólo es una marcha de revoltosas que ocurre una vez al año, para muchas mujeres es la causa de sus vidas por lo que constantemente buscan espacios en los cuales se les escuche y se generen propuestas para atender sus necesidades. Cómo las colectivas que se reunieron este miércoles con la Secretaría de la Mujer, a fin de generar propuestas que deriven en una mejor atención para las demandas de una vida libre de discriminación y todo tipo de violencia en nuestra contra. Cómo decía mi abuela “dos cabezas piensan mejor que una” ojalá que las propuestas generadas por todas esas mujeres se lleven al plano de la realidad y no queden sólo en una linda fotografía para medios y redes sociales.

Quienes sí trabajaron en conjunto, son las mujeres Rarámuris que obtuvieron el tercer lugar durante el maratón “The Speed Project” que consiste en un recorrido de aproximadamente 550 kilómetros desde el muelle de Santa Mónica (Los Ángeles) y termina en el letrero de bienvenida de Las Vegas. Según la página de instagram @ra_ra_raaaaaa Ángela, Argelia, Isidora, Lucy, Vero y Yulisa, realizaron su recorrido sin equipamiento especial, con sus huaraches y ropa típica de la comunidad Rarámuri de la sierra de Chihuahua. Y es que estás mujeres, al igual que el resto de su comunidad, están acostumbradas a realizar recorridos de grandes distancias a pie por la sierra, ya que es el único modo en el que pueden trasladarse durante su día a día. En esta ocasión, sacaron provecho de las habilidades que desarrollaron de manera natural como parte de su rutina, colocando el nombre de México en alto y a las mujeres de su comunidad en los ojos del público internacional deportivo. Estás valientes mujeres son el ejemplo de que “dos cabezas piensan mejor que una” y que es posible alcanzar nuestros objetivos si nos rodeamos de las personas correctas.

Si en este momento no te sientes parte del movimiento feminista está bien, no tienes que autonombrarte feminista para unirte a la lucha de las mujeres, lo que sí te invito a hacer es a unirte a tus hermanas, amigas, compañeras de trabajo y trabajar en conjunto para lograr el entorno libre de violencia que nos merecemos. Si el mundo es hostil y violento no lo seas tú. Dejemos de atacar a otras mujeres bajo la premisa patriarcal de que “el peor enemigo de una mujer es otra mujer” porque eso no tiene porqué ser verdad si nosotras no lo permitimos. Seamos una en la construcción consciente y constante de un mundo más justo y equitativo para nosotras, tengamos la capacidad de pensar juntas y unámonos en la carrera contra las diversas formas de opresión que el sistema nos impone. La lucha de las mujeres no ocurre sólo el #8M se encuentra presente en cada pequeña acción que realizamos. Si hoy tengo este espacio para dirigirme a ustedes, es porque antes, hubo mujeres rebeldes que escribieron bajo seudónimos masculinos para ejercer un arte que les estaba vedado. Es difícil más no imposible, encontremos juntas las formas de lograr nuestros propósitos, pues como decía mi abuela “dos cabezas piensan mejor que una” y mientras más seamos, mejor.