No fue injerencia, sino diálogo, dice Zaldívar

(Agencia Reforma)

Ciudad de México.- El ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, aseguró que durante su gestión al frente del máximo tribunal nunca hubo una injerencia indebida del Ejecutivo federal.

Este miércoles, el presidente Andrés Manuel López Obrador admitió que cuando Zaldívar estaba al frente de la Corte, el Gobierno federal podía intervenir en casos que eran de su interés.

Este jueves, en entrevista con Radio Fórmula, en donde advirtió que no volverá a referirse a las declaraciones realizadas por López Obrador, Zaldívar  afirmó que con el presidente y con el Gobierno federal tuvo una relación de diálogo, cordialidad y respeto, lo que les permitió incluso tomar medidas de protección para jueces y magistrados, gracias a la información que estos le proporcionaban.

Dijo que el que el Gobierno haya acudido a la Corte y a los Tribunales a hacer valer sus argumentos no tiene nada de peculiar. Por el contrario, apuntó, tienen derecho a hacerlo como parte interesada.

«Nunca hubo en mi administración ninguna injerencia indebida al Poder Judicial», señaló.

Zaldívar rechazó haber ejercido algún tipo de coacción para interferir en el sentido de sus decisiones.

«Durante los 4 años que fui presidente, nunca le hablé, ni le he hablado a ningún juez, a ningún magistrado para sugerirle, para insinuarle, mucho menos para instruirle que fallara un asunto en un sentido o en otro», aseveró.

Indicó que el presidente se expresó de la manera en la que lo hizo por no ser experto en la materia y, quizá, por la información que recibe de los funcionarios públicos encargados de la relación con el Poder Judicial.

Atribuyó sus expresiones también a que el Mandatario federal está percibiendo que, a diferencia de anteriores presidencias en la Corte, en la actual la política de cero corrupción se ha relajado.

Señaló que el diálogo con el Mandatario federal durante su presidencia en la Corte no fue diferente al que existió con los ex Presidentes Felipe Calderón o Enrique Peña Nieto. (AGENCIA REFORMA)