A LA BÁSCULA

El costo de los sobrecostos 

Dice un dicho popular que las obras más caras del mundo son las que no tienen planeación, como diría el clásico, esa frase le cae ‘como anillo al dedo’ a las obras icónicas y principales de la actual administración ‘cuatrotera’, entre ellas el Tren Maya, la Refinería de Dos Bocas, el AIFA y por ser de interés regional, y estatal de Coahuila y Durango, incluimos también Agua Saludable para La Laguna.

Especialistas consideran en el caso de las tres primeras obras no hay un plan con visión a largo plazo, pero sí una total falta de planeación, que ha derivado en retrasos en la conclusión y entrega de las obras por lo que todas han tenido que ser inauguradas, aunque no estén concluidas, así como en el pago de sobrecostos considerables.

Cuando fue presentado el proyecto del Tren Maya se dijo que tendría un costo de 156 mil millones de pesos. Durante el recorrido de inauguración de la primera etapa, el presidente admitió que había un incremento del costo, que alcanzaría entre 200 mil y 300 mil millones de pesos ‘no tengo la cifra exacta’, argumentó, como si el rango entre estas cantidades que mencionó fuera de unos cuantos miles de pesos, y no miles de millones.

Sin embargo, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación para este 2024, al proyecto se le asignaron 120 mil millones de pesos más, con lo que, si la obra se termina este año, habrá llegado a los 511 mil 200 millones de pesos, es decir entre más de 200 mil y 300 mil millones de pesos de lo que prometió López Obrador durante el evento de inauguración de esa primera etapa; y 355 mil millones de pesos más de lo que originalmente se dijo que costaría ¿Pecata minuta, verdad?

La refinería de Dos Bocas, uno de los 100 compromisos establecidos por Andrés Manuel López Obrador el día de su toma de posesión ante un abarrotado Zócalo, inicialmente se dijo que tendría un costo de 8 mil millones de dólares, cantidad en la que valuó la obra el gobierno mexicano en 2019.

Un año más tarde, en octubre de 2020 en una comparecencia ante la cámara de diputados, el director de Pemex, Octavio Romero dijo que la refinería alcanzaría un costo de 8 mil 900 millones de dólares, y para el año 2022, la entonces secretaría de Energía, Rocío Nahle, ya la cuantificaba en 9 mil 800 millones de dólares. En junio de ese mismo año, el presidente admitió que había un aumento en el costo de la obra pero que era ‘nada más’ de entre 20 y 30 por ciento, por lo que costaría entre 11 mil y 12 mil millones de dólares. Con el PEF de 2024 habrá recibido recursos por 11 mil 650 millones de dólares; es decir, 3 mil 650 millones –pero de dólares- más que lo planeado y presupuestado originalmente.

El AIFA, que originalmente fue presupuestado en 70 mil millones de pesos, terminó costando 90 mil millones de pesos, 20 mil millones de pesos de diferencia, algo así como 29 por ciento de más ¿Otra vez pecata minuta?

En el caso del proyecto Agua Saludable para La Laguna, que no alcanza los millonarios montos de inversión que las tres obras mencionadas, y quizá por ello a nivel nacional no le ponen la atención e interés que debiera, cuando fue puesto en marcha en marzo de 2021, se dijo que tendría un costo de 8 mil millones de pesos y estaría totalmente terminada a finales de 2023. Ninguna de las dos cosas se cumplieron.

El pasado 21 de diciembre el Presidente vino a inaugurar lo que hasta ese momento se supo que era solo la primera etapa, de una obra que está inconclusa, que todavía le falta mucho para alcanzar en los hechos la cristalización del proyecto que nos presentaron en marzo de 2021, que sobre la marcha ha sufrido considerables modificaciones porque ya no se construirán los dos mega tanques que se prometieron, uno para surtir los municipios de Coahuila y el otro para los de Durango.

A pesar de la reducción en construcciones de la obra, ésta pasó a agosto de 2022 a tener un costo de 11 mil millones de pesos, aunque el presidente prometió que se haría lo posible para que quedara en 9 mil millones de pesos porque querían ahorrar. Tampoco esa promesa se cumplió, porque de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación para aplicarse este 2024, con los 5 mil 911 millones de pesos etiquetados para este año, y si es que se termina este año, llegará a los 17 mil millones de pesos. Una diferencia de 9 mil millones de pesos en relación con el presupuesto y proyecto original, es decir, poco más del doble de lo que se valuó la obra al momento de anunciarla.

Solo en estas cuatro obras, en las que se proyectaron con costos en pesos hay un sobreprecio de 384 mil millones de pesos, y en la que se tasó en dólares un diferencial de 3 mil 650 millones de billetes verdes. Cuánta razón tiene el dicho que las obras más caras del mundo son las que no tienen planeación. Estos cuatro botones de ejemplo fueron inauguradas inconclusas todas, y con sobre costos millonarios ¿Con cargo a quién? A usted, a mí, a todos los mexicanos.

En esos malabares millonarios uno se pregunta ¿y dónde quedó la bolita?

 

laotraplana@gmail.com

 

@JulianParraIba

 

Autor

Julian Parra Ibarra
Es director del diario digital La Otra Plana y la revista impresa Metrópolis. En cuatro décadas de ejercicio periodístico ha trabajado en diarios como El Norte de Monterrey, La Opinión-Milenio en Torreón, Esto en la Ciudad de México y a.m. en León, Guanajuato entre otros; ha sido conductor en programas de radio y televisión. Es columnista en varios medios impresos y digitales de Coahuila y Durango.
Otros artículos del mismo autor