Ante la violencia de género hay que modificar patrones culturales

Normalizada socialmente, persiste la agresión física, emocional, económica y ahora digital, anotó Carola García Calderón

Ciudad de México.- Lograr sociedades libres de violencia empieza por cada persona en lo individual, reconociendo que es una práctica normalizada y generalizada sobre la que debemos reflexionar con información y mirada crítica, especialmente sobre la de género, señaló la directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, Carola García Calderón.

Durante las actividades conmemorativas por el 25N que esta entidad universitaria inició con el conversatorio “Caminando juntos hacia espacios libres de violencia”, el cual abordará durante 16 días esa temática, añadió que persiste la agresión física, emocional, económica y ahora digital.

En la mesa inaugural realizada en el auditorio Pablo González Casanova, García Calderón recordó que, según cifras de la Organización de las Naciones Unidas en 2021, 35 por ciento de las mujeres a nivel mundial experimentaron violencia física o sexual en algún momento de su vida.

Además, en el orbe 45 mil féminas y niñas fallecieron a manos de su pareja o de familiares. Esto significa que, en promedio, más de cinco son asesinadas cada hora. Y de los ataques domésticos no se habla muchas veces, se vive solitariamente, con dificultades para ir a denunciar a alguien de la propia familia, comentó.

Puntualizó que la labor de ellas en el hogar es considerada “no trabajo”, pues no existe, carece de paga, se realiza sin horarios y la mayor recompensa, es decir: “qué rica está la comida o qué limpia está la casa”.

En este contexto, García Calderón sugirió generar una cultura de la denuncia, lo que significa cambiar patrones y educarnos; además de acercarse a las unidades de igualdad de género de escuelas y facultades, así como a la Coordinación para la Igualdad de Género de la UNAM.

En su oportunidad, la secretaria técnica de la Unidad de Género de la FCPyS, Mónica Susana Amilpas García, manifestó que la problemática de la violencia de género es persistente, razón por la cual la perspectiva en la materia se debe transversalizar para lograr acciones más contundentes hacia la igualdad.

De acuerdo con el número cinco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, para el año 2030 debemos estar hablando de igualdad de género a nivel internacional en todos los sectores y las esferas sociales. Nos faltan siete años y aún nos encontramos con comentarios como: “niña el último”, “lloras como niña” o “calladita te ves más bonita”. Amilpas García dijo que nos han educado generacionalmente en un modelo machista y patriarcal.

Compartir estos tópicos en sesiones como esta nos ayuda a visibilizar qué difícil es reconocer que nosotros mismos perpetuamos la agresión, y que incluso a nivel de Universidad no estamos exentos de replicar estos espacios.

Al hacer uso de la palabra, la integrante de la Coordinación de Seguimiento y Evaluación del Área Interdisciplinaria de la FCPyS, Alejandra González Bazúa, aseveró: necesitamos interpelarnos y reconocer que la violencia machista está entre nosotros y debe ser atendida.

“Aquí estamos en la Universidad volviendo a este día, el 25N, como un motor profundo de reflexión que pretende fomentar la información y la empatía”. A partir de 2023 “Violencia contra las mujeres: genealogía, actualidad y resistencias” es una asignatura obligatoria en esta entidad académica, apuntó. (UNAM)