La guerra se manifiesta en la sociedad desde la aparición del hombre, es un fenómeno social, donde siempre está presente un ingrediente primordial: el poder, que representa la capacidad de hacer que ocurran determinadas cosas. El sociólogo Max Weber considera que el poder es «la probabilidad de imponer la propia voluntad, dentro de una relación social, aun contra toda resistencia y cualquiera que sea el fundamento de esa probabilidad”. Por lo tanto, la guerra es utilizada para alcanzar el poder ya sea éste económico, para ganar territorio, obtener riquezas, imponer una religión, ganar recursos naturales. Cuando se manifiesta la guerra se da un enfrentamiento violento entre dos bandos que luchan por un determinado objetivo. Lo característico y terrible en una guerra es el nivel de crueldad presente en ella.
Buscando definiciones de guerra encontré que existen una gran cantidad de manifestaciones del término: La guerra civil es el enfrentamiento armado entre miembros de una república o ciudadanos de una misma unidad política. Guerra mundial conflicto armado entre la mayoría de las naciones del mundo. La guerra de guerrillas se manifiesta en los países cuando pequeños grupos intentan desestabilizar y vencer al enemigo. La guerra de independencia se declara para liberarse de la dominación territorial. La guerra interna enfrentamientos armados y prolongados entre el gobierno y uno o más grupos armados. La guerra sucia se da cuando se acaba con pueblos alejados, se instalan cárceles clandestinas, existe el destierro, la persecución, la tortura, las desapariciones. La guerra internacional enfrentamiento entre Estados o Estado y un pueblo sometido a dominación colonial, ocupación extranjera, régimen racista, donde se aplican las leyes del derecho internacional humanitario.
Aún hay más tipos conflictos como la guerra convencional se lleva a cabo mediante, medios, teorías, estrategias y tácticas tradicionales, en cambio en la guerra no convencional no existe enfrentamiento físico entre fuerzas militares, se centra en desestabilizar al enemigo utilizando el miedo. En la guerra psicológica se instrumentan acciones para direccionar conductas, en busca de un control social, político o militar, sin utilizar las armas. En todas las guerras se detona lo que afirma el filósofo alemán Friedrich Nietzsche quien consideraba que “La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido”. Todas las definiciones hacen referencia a enfrentamientos donde se utilizan las armas de todo tipo para lograr obtener algo que considera valioso y con él se obtener el poder. En estos tiempos los medios de comunicación cubren perfectamente cualquier enfrentamiento armado mostrando el más mínimo detalle de lo que sucede en ella, es desgarrador ver esas imágenes.
No importa la definición que se dé a la guerra, en ella va implícito el sufrimiento, la deshumanización, el desorden, la pelea, la discrepancia, que lleva a los seres humanos a enfrentarse hasta la muerte. En una guerra afloran en las personas los más bajos sentimientos, se percibe el trato inconcebible que dan a sus semejantes que consideran los enemigos a vencer, lo hacen como si fueran animales, con vulgaridad, inmoralidad e irracionalidad. Se desborda el odio, la ira; la destrucción está presente siempre. Es detestable ver escenas donde los hombres muestran su placer, su alegría, al acabar con la vida de mujeres, niños, ancianos, de una manera perversa y cruel.
Es increíble como la humanidad tiene avances tecnológicos, científicos y no avancemos en lo ético, en distinguir el bien del mal; en lo espiritual, pensando en la esencia del ser humano que es luz, fuerza, bondad, solidaridad, caritativo, compasivo, agradecido, es decir, debemos darnos a la tarea de iniciar la búsqueda del autoconocimiento, de la paz interior, para encontrar la trascendencia en este mundo y evitar con este comportamiento las guerras.
Lo absurdo de la guerra es que carece de todo sentido, porque está presente la destrucción como ya se señaló anteriormente en su máxima expresión, no hay ninguna lógica en ese comportamiento son conductas estúpidas. Albert Camus señala en su libro “El mito de Sísifo”. (Recordemos este mito, los dioses castigan a Sísifo con subir una roca a una montaña dejarla caer y repetir la tarea hasta la eternidad, lectura recomendable) “Para un espíritu absurdo la razón es vana y no hay nada más allá de la razón”. Se relata la idea del héroe absurdo. Lo inadmisible de la guerra es que se atenta contra la vida de seres más vulnerables.
Autor
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Cursó la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública en la UNAM. Obtuvo el Grado de Maestra en Psicología Social de Grupos e Instituciones por la UAM-Xochimilco y el Doctorado en Planeación y Liderazgo Educativo en la Universidad Autónoma del Noreste. Cuenta con la Especialidad en Formación de Educadores de Adultos por la UPN; y con los siguientes diplomados: en Calidad Total en el Servicio Público, Análisis Politológico, y en Administración Municipal en la UNAM, entre otros.
Ha desempeñado diferentes cargos públicos a nivel Federal, Estatal y Municipal e impartido cursos de capacitación para funcionarios públicos, maestros, ejidatarios en el área de Administración Pública y Educación. Catedrática en la UNAM, UA de C, UVM, La Salle y en la UAAAN. Asesora y sinodal en exámenes profesionales en el nivel licenciatura, maestría y doctorado. Ha publicado varios artículos en el área de administración pública y educación en diferentes revistas especializadas, ha asistido a diferentes Congresos a nivel nacional e internacional como ponente en el área de Administración Pública y Educación, coautora en dos libros. Autora del libro Islas de Tierra firme.
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