Este domingo, el Instituto de las Hermanas Catequistas Guadalupanas, orden religiosa fundada en Saltillo en 1923 llega a su primer centenario de vida tras haber sido creada por Jesús María Echavarría y Aguirre, siervo de Dios y tercer obispo de la Diócesis de Saltillo.
Por tal motivo, el obispo Hilario González García encabezó en el auditorio del Colegio Ignacio Zaragoza, la celebración de una eucaristía en honor a las hermanas y familiares que han encomendado su vida a Dios para llevar a cabo una labor educativa y evangelizadora en la ciudad.
El prelado destacó la labor de las Catequistas Guadalupanas al saber encaminar la enseñanza de los valores éticos a través de una educación de calidad, así como los valores religiosos para llevar una sana espiritualidad al núcleo familiar.
“Reconocemos primero, la intención de Monseñor Jesús María Echavarría por encabezar este movimiento de hermanas catequistas que ha perdurado por un siglo. Reconocemos también la vocación y la labor de las mujeres entronas, trabajadores y leales que conforman este importante instituto” comentó. (EDUARDO SERNA).
Autor
- Reportero del periódico Acontecer de Ramos Arizpe y corresponsal de El Heraldo de Saltillo.
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