A punto de iniciar fabricación de motores eléctricos en Ramos Arizpe

La planta LG Magna e-Powertrain comenzará a operar en un mes y fabricará hasta 1 millón de motores eléctricos, principalmente para General Motors

México está a días de arrancar la “era de la electrificación de autopartes” para surtir a la industria automotriz en Norteamérica, con la operación de la planta de LG Magna e-Powertrain, ubicada en Ramos Arizpe, Coahuila, que se estrenará en la fabricación 1 millón de motores 100% eléctricos para ser destinados a las armadoras de vehículos ligeros mayoritariamente a Estados Unidos y General Motors en nuestro país.

En entrevista con El Economista, Alberto Bustamante, consejero y asesor del sector automotriz, dijo que las operaciones de la planta creada por una joint-venture de la compañía LG electronics y Magna International de origen coreano dará inicio en un mes en Coahuila para abastecer al mercado estadounidense, que tiene como meta fabricar más de 1 millón de motores, pues la industria de Estados Unidos se prepara para lograr la meta de más de 20 millones vehículos eléctricos hacia el 2030.

LG Magna e-Powertrain invirtió 100 millones de dólares para la edificación de la planta en Ramos Arizpe, Coahuila, en julio del 2022, y en unos días se convertirá en la primera base de producción en Norteamérica para producir inversores, motores y cargadores (como parte del tren motriz) integrados para respaldar la producción de vehículos eléctricos.

Ya anteriormente, la nueva compañía había anunciado que General Motors sería el cliente fundamental de esta nueva instalación, la cual tendría un papel clave para que la armadora pueda construir una cadena de suministro de vehículos eléctricos.

Hasta el momento, China es líder mundial en la fabricación de motores eléctricos, pero dadas las circunstancias de las nuevas reglas del Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC) y el nearshoring, México se encamina a la ruta convertirse en uno de los líderes de manufactura global de Vehículos Eléctricos (VE).

Actualmente existe una cartera por 15,000 millones de dólares que pretenden realizar empresas de origen alemán, taiwanés, chino, Coreano, estadounidense y canadiense para abrir o ampliar fábricas que produzcan autopartes, desde cargadores para motores eléctricos, baterías de iones de litio, además de airbags, sistemas de frenos, empaques de interiores, espejos retrovisores y asientos, entre otros artículos, que ayudarán a fortalecer la cadena de suministros para transitar hacia la electromovilidad, informó la Industria Nacional de Autopartes (INA). (Con información de El Economista)

Autor

Alberto Boardman
Alberto Boardman
Columnista