Daniel Ortega disuelve la Cruz Roja en Nicaragua y confisca todos sus bienes

(Xinhua/Xin Yuewei)

Managua, Nicaragua.- El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, en un hecho sin precedentes, ordenó la disolución de la humanitaria Cruz Roja, tras acusarla de haber actuado en contra de sus principios en las manifestaciones antigubernamentales que estallaron hace cinco años, en la que brindaron auxilio a miles de heridos.

En consecuencia, el gobierno nicaragüense emitió el pasado 10 de mayo, un decreto que clausura y decomisó los bienes de la Cruz Roja Nicaragüense, una organización humanitaria que funcionaba desde 1931 tras un terremoto que sacudió Managua.

A través de un acuerdo presidencial publicado este 11 de mayo en el Diario Oficial La Gaceta, Ortega hizo saber a los nicaragüenses que la Asamblea Nacional (Parlamento), controlado por el oficialismo, derogó el miércoles con carácter urgente un decreto legislativo de 1958 mediante el cual se creó legalmente la Cruz Roja Nicaragüense. Además, Ortega también dio su visto bueno para la creación de una nueva “Cruz Roja Nicaragüense”, adscrita al Ministerio de Salud, y que todo el patrimonio, bienes y acciones que a la fecha pertenezcan a la Cruz Roja Nicaragüense pasarán a ser propiedad del Estado, y serán administrados por la nueva organización humanitaria estatal.

Hasta ahora, la Cruz Roja Nicaragüense, que se rige bajo los principios de Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, y que cuenta con edificios, propiedades y vehículos en los diferentes municipios de Nicaragua, no se ha pronunciado sobre esa ley. Sin embargo, organismos humanitarios nicaragüenses han condenado el cierre de la Cruz Roja por atender a miles de heridos en las protestas de 2018, y que el Estado haya utilizado “su política confiscatoria para quitarle propiedades y equipos”.

“En los actos acontecidos en el año 2018 que atentaron contra la paz y estabilidad de la nación, algunas filiales de esta Asociación actuaron en contra de estos principios y de su Acta Constitutiva y Estatutos; y la Asociación misma transgredió las leyes del país al desentenderse y hasta apoyar este actuar de sus filiales”, indica el documento aprobado por los legisladores sandinistas.

El Gobierno también sostiene que la Cruz Roja Nicaragüense ha incumplido “sus deberes y obligaciones establecidas en la Ley N° 1115, Ley General de Regulación y Control de Organismos sin Fines de Lucro (OSFL)”, al no presentar “estados financieros, balance contable, declaración fiscal, falta de verificación de sus donantes y proveedores de fondos, información desactualizada en el registro del Ministerio de Gobernación”. Es decir, las mismas alegaciones que el régimen de Ortega y Murillo ha hecho en contra de las tres mil 290 Organizaciones no Gubernamentales (ONG) que han decapitado desde 2018 por no someterse a la Ley de Agentes Extranjeros, una de las normativas para acallar a y desarticular a la sociedad civil.

La Cruz Roja Internacional ha intentado ser un mediador humanitario en la crisis sociopolítica de Nicaragua, apoyándose en la asociación hoy disuelta, en especial en los temas referidos a los presos políticos. Sin embargo, el coraje de Ortega y su vicepresidenta (su esposa) contra la institución internacional tiene como precedente no sólo negarles el ingreso a las prisiones, sino que en marzo de 2022 expulsaron al jefe de misión Thomas Ess, sin informar el motivo de la decisión.

Aunado a esto, la anulación de la Cruz Roja de Nicaragua interrumpe más de una docena de proyectos y cursos de humanitarios que desarrollan en comunidades indígenas, temas de prevención de la violencia, inseguridad alimentaria, sequía, y el análisis de muestras biológicas humanas que contribuyen al estudio, prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades en sus laboratorios en todo el país.

Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto a su esposa Rosario Murillo como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión. (EL HERALDO)

 

https://www.lagaceta.gob.ni/la-gaceta-no-82-jueves-11-de-mayo-de-2023/