Hay basureros clandestinos incluso en zonas urbanas

Las inmediaciones de la escuela primaria Luis Donaldo Colosio Murrieta ubicada en la colonia Zaragoza, al oriente de la ciudad, han sido convertidas en un basurero al estar ubicada a la orilla de un arroyo, lo que representa un grave riesgo de salud para los alumnos de este plantel.

Vecinos del sector y que viven sobre la calle María Herrera denunciaron que en esta calle cerrada es común que lleguen camionetas y hasta personas a pie a dejar sus desechos en bolsas o simplemente arrojarlos al aire libre.

La basura se puede ver a solo algunos metros de la puerta de entrada de la institución educativa, donde abundan las bolsas con restos de ropa, zapatos y enseres del hogar.

De por si la escuela está rodeada de maleza, terrenos baldíos y tiene a su lado un arroyo que viene desde la sierra Zapalinamé, colonias más arriba, y desemboca en esta zona, arrastrando consigo en cada temporada de lluvias toda clase de desperdicios que se arrojan en este lecho seco.

“Cerca de este lugar se tuvo que poner hace unos meses una caseta de policía lo que ayudó por un tiempo, pero al ya no estar, se volvió a generar este problema” señaló Nancy, habitante de este sector.

En ese lugar se cuenta con un puente para el cruce de personas del arroyo hacia la colonia, y que es usado por la gente de otras colonias para traer su basura a este punto aprovechando la oscuridad y lo desolado de los terrenos.

Ante el riesgo de la fauna nociva, como moscas, ratas y todo tipo de animales atraídos por los desechos pidieron la intervención de autoridades de ecología y de limpieza para quitar toda esta contaminación. (DAVID GONZÁLEZ/INFONOR)