SALTILLO

José Carlos Serrato: el coleccionista saltillense entre luchadores y máscaras

Por

20 septiembre, 2022

Aficionado al deporte de rudos y técnicos, cuando tenía 10 años, el saltillense José Carlos Serrato Rodríguez llevó más allá su pasión por la lucha libre, ya que comenzó a coleccionar figuras articuladas y máscaras de luchadores profesionales del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), AAA y WWE.

“Todo comienza desde niño, cuando uno comienza a coleccionar cualquier cosita que sea de su agrado; empezando a coleccionar cosas de la lucha libre y el futbol. El gusto por la lucha libre empezó desde los cuatro o cinco años, cuando la veíamos por la televisión”, compartió este martes con medios.

“Ahí empezó mi gustó por la lucha libre y poco a poco fui creciendo y haciéndome de más cosas, de coleccionar más cosas de la lucha libre”, agregó.

Huracán Ramírez, Atlantis, La Parka, El Santo, Místico, Dr. Wagner y Mil Máscaras, son algunos de los gladiadores mexicanos cuyas figuras e icónicas máscaras decoran una de las habitaciones de su vivienda ubicada la calle Alejandro González de la colonia Nuevo Amanecer.

“Ya perdí la cuenta (de cuántas figuras y máscaras tengo) porque así como compro también le quito a la colección, pero pienso que son entre mil 500, más o menos”, estimó.

DEL COLECCIONISMO A LA FABRICACIÓN

En la búsqueda de ampliar su colección y generar una fuente de autoempleo, el ciudadano de 31 años decidió fabricar sus propias “figuras de acción” inspiradas en luchadores o personajes famosos de la cultura mexicana, las cuales están disponibles a la venta bajo un costo de $590.00 pesos para el público en general.

“Le metemos la creatividad, lo que más me piden son luchadores; como la base es de luchadores, es lo que me piden más y es lo que se me facilita más. Para mí es un gusto que la gente voltee a ver mi trabajo”, apuntó.

Para conocer más de la pasión luchística del entrevistado y su trabajo, se puede consultar la página de Facebook “Figuras Custom CR” o llamar al teléfono 844-320-0614 para agendar una visita a su “santuario luchístico”. (OMAR SOTO / EL HERALDO)