Con misa, lamenta obispo HIlario deceso de canciller de la Diócesis de Saltillo   

Este lunes a mediodía el obispo de la Diócesis de Saltillo, Hilario González García, celebró una misa de exequias en la Parroquia de San Patricio por el eterno descanso del canciller de esta organización, Antonio Rodolfo Ramos Sosa, quien falleció este sábado a causa de un infarto, luego de ser internado en un nosocomio por Covid-19.

Desde el templo ubicado en la colonia Vista Hermosa de Saltillo, donde el presbítero fungió como párroco, y ante sus cenizas, monseñor Hilario lamentó el deceso del religioso y la de otros 11 sacerdotes de la Diócesis que encabeza, quienes han partido de este mundo en los últimos dos años víctimas de Covid-19.

«El padre Antonio fue un buen sacerdote, encargado de la cancillería. Siempre duele y da tristeza el perder a un hermano, a un amigo, a un sacerdote, pero confiamos en el Señor, sabemos que para eso estamos, para dar la vida por Él; para entregarnos hasta donde Él nos permita vivir y creo que así fue la entrega del padre Antonio», dijo el obispo.
«Le pedimos al Señor que lo reciba en su casa y le recompense toda su vocación sacerdotal. Era mi vecino de oficina y vivíamos juntos en la Casa del Sacerdote, tuvimos una buena relación no solamente en el trabajo eclesiastico sino también de compartir la vida sacerdotal».

 

BREVE SEMBLANZA

 

El Padre Tony nació el 23 de mayo de 1948 en Torreón, Coahuila y fue contador público de profesión. Estudió filosofía y teología en el Seminario de Guadalajara para después realizar su diaconado en el Seminario de Saltillo.

Ordenado como sacerdote el 27 de junio 2020, entre los cargos que ocupó en la Diócesis de Saltillo destacan el de vicario parroquial en Nuestra Señora de San Juan de los Lagos, coordinador del curso introductorio en Seminario de Saltillo, párroco de San Patricio y el de secretario canciller desde 2018. (OMAR SOTO / EL HERALDO)