Resalta UNICEF las voces y participación adolescente durante pandemia de COVID-19

 (Xinhua/Joaquín Hernández) (jh) (jg) (vf) (dp)

Ciudad de México.- La participación de las y los adolescentes al ejercer su derecho de expresar su opinión libremente durante la pandemia de COVID-19 ha sido fundamental para conocer cómo se sienten, cómo perciben la enfermedad y cómo les ha afectado, resaltó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, a propósito del Día Internacional de la Juventud.

Mediante las encuestas U-Report, lideradas por UNICEF y en las que han participado 162 mil jóvenes de entre 13 y 24 años de todo el país, ellas y ellos se han manifestado desde que comenzó la pandemia y se enfrentaron a sus consecuencias, tales como el cierre físico de escuelas y las medidas de confinamiento -que a su vez han venido causando problemas de salud mental, disminución del ingreso en los hogares y reducción en la disponibilidad de alimentos.

“Durante este año y medio, hemos encontrado que, al igual que los adultos y niños, las y los adolescentes también han sufrido afectaciones y no solamente en cuanto a su salud”, señaló María Eugenia de Diego, Especialista en Desarrollo Adolescente de UNICEF en México.   “Ellas y ellos nos reportan problemas como estrés, alimentación y ejercicio insuficientes, etc., pero también aspectos positivos como ayudar a su comunidad, apoyar a sus compañeras y compañeros e interés en liderar la generación de cambios. El Día Internacional de la Juventud es un buen momento para recordar la importancia de escuchar sus voces y apoyar sus esfuerzos por buscar soluciones”.

En una de las encuestas más recientes, “Salud mental en la pandemia”, realizada el pasado mayo, el 87% de los participantes manifestaron que en algún momento necesitaron apoyo para gestionar sentimientos difíciles o estrés, pero no pidieron ayuda. Entre los que respondieron así, 40% manifestaron que no sabrían dónde encontrarla, 27% que temen lo que la gente pueda pensar, 9% consideraron que el asunto no era tan grave como para necesitar apoyo y 7% que el confinamiento les impidió hacerlo.

La adolescencia es la etapa en la que tienden a comenzar las afectaciones de salud mental y, por lo tanto, es un momento clave de acción. Al menos un 20% de las y los adolescentes sufre una afectación de salud mental según la OMS (2020) que en numerosas ocasiones no se diagnostica a tiempo.  Asimismo, la actividad física y la buena nutrición, sumamente impactadas por el confinamiento, pueden contribuir al deterioro de su salud emocional.

Las medidas de aislamiento han afectado emocionalmente a adultos y niños, pero en el caso de las y los adolescentes en particular el confinamiento les ha impedido convivir con sus pares en una etapa crucial para el desarrollo de habilidades clave para la vida vinculadas a la independencia y socialización.

“La distancia e imposibilidad de estar en contacto presencial con sus compañeras y compañeros desgasta la confianza que conlleva una relación cercana. Adicionalmente, el aumento de la violencia en estos momentos, particularmente contra las mujeres, impacta no solo física y emocionalmente a las y los adolescentes si no también en la construcción y concepción de habilidades como la toma de decisiones”, explicó Eugenia de Diego.

Las y los adolescentes aprenden del uso de la violencia para resolver problemas y expresar sus creencias y emociones. Si esos comportamientos problemáticos no se abordan, su agresividad puede persistir y aumentar, surgiendo otros factores asociados a la perpetración de la violencia en el futuro, como impulsividad, control emocional precario y destrezas deficientes tanto en lo referente a conducta social como en cuanto a toma de decisiones.

Por otra parte, el 32.3% de los hogares con niñas, niños y adolescentes reportó una reducción de sus ingresos durante el confinamiento (ENCOVID-19 Infancia, UNICEF 2020) y, en la encuesta “Nutrición y actividad física”, realizada también el pasado mayo, el 46% de los adolescentes reportaron que les ha sido más difícil comer alimentos saludables; entre ellos, el 32% señaló además que su familia percibe menos ingresos y el 23% que hay menos comida saludable a su alcance.

En lo que concierne a actividad física, otro importante aspecto para el desarrollo del ser humano durante la adolescencia, un 56% de las y los encuestados señalo que la redujo y un 26% que la incrementó.

Las y los adolescentes y jóvenes constituyen el 17% de la población en México, y muchos de ellos y ellas están liderando acciones para mejorar su entorno tanto a nivel nacional como mundial. Es importante que, en el Día Internacional de la Juventud, celebremos el liderazgo que ellas y ellos ejercen, sin olvidar que son uno de los grupos más afectados por las consecuencias de la pandemia y, por lo tanto, su protección es indispensable, según señala UNICEF.

“Las y los adolescentes son los líderes del futuro, capaces de impulsar legislaciones y programas para marcar la agenda futura en materia de igualdad, diversidad, medio ambiente, seguridad y educación. Por ello, su bienestar es clave”, resaltó la especialista de la organización.

“Desde UNICEF llamamos a los distintos actores nacionales a intensificar sus esfuerzos por mejorar la salud física y mental de las y los adolescentes y jóvenes, brindándoles contención emocional, información adecuada sobre cómo cuidar su salud y espacios que les permitan expresarse y ejercer liderazgo en temas que les afectan, aspectos todos clave para su desarrollo individual y para el futuro de México y el mundo”. (UNICEF)