EN EL TINTERO

 Competencia

Por varios años, Alfonso Yáñez Arreola, ha manifestado su intención de contender por la dirección de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Autónoma de Coahuila. No es desconocido para nadie que su corazón late y fuerte, y esta es la oportunidad para que logre su objetivo.

Pero aunque esperaba tener el camino libre para cumplir su tan anhelado sueño, sorpresivamente surgió una contrincante, la abogada y académica de la Facultad de Jurisprudencia Larisa Morales, quien envió un mensaje a la comunidad universitaria expresando sus aspiraciones.

Sin embargo, quien no la tiene fácil, es precisamente la abogada que ha denunciado desigualdad en el proceso, luego de que este jueves se le negó el registro.

El Consejo Directivo de la Facultad de Jurisprudencia negó por unanimidad el registro a Larisa Morales, egresada de esa Institución y con quince años de antigüedad de docencia, como candidata para contender por la dirección de esa Facultad.

El fundamento alegado por el órgano Electoral encontró sustento en los artículos 79 y 8 fracción I, del Estatuto Universitario de la Universidad Autónoma de Coahuila, bajo el argumento de que la docente no cumplía con él requisito de definitividad.

La anterior, aunque la abogada asegura que acreditó su calidad de Docente de tiempo completo en la Institución, órgano qué considera es afín al proyecto del hoy candidato Yáñez Arreola.

La aspirante reprobó la resolución de dicho órgano y dejó ver la desigualdad con la que se iniciaba en la contienda, dejando claro que no desistirá, pues apuesta por la igualdad de oportunidades, la no violencia política hacia las mujeres, y la conquista de espacios de decisión en igualdad de oportunidades.

Lo cierto, es que la Facultad de Jurisprudencia se cuece aparte, y si los estudiantes muestran su inconformidad no tardarán en imponerse ante las autoridades educativas impidiendo el típico dedazo. Habrá que ver con quien simpatiza la mayoría, porque de estar en descuerdo con alguna situación no falta que estalle alguna bomba y los ánimos se calienten.

Si no pregúntenle al exdirector de la Facultad, Luis Efrén Ríos Vega a quien no le quedó de otra más que renunciar por la presión de los estudiantes que denunciaron varias irregularidades durante su gestión. Y como no, si el señor, hoy flamante magistrado gastaba hasta medio millón en meros caprichos como la compra de una puerta para su despacho.

Veremos como transcurre el proceso electoral interno, si los alumnos permiten que Alfonso Yáñez vaya sólo o se sujete a la competencia de la maestra Larisa, total si tiene la simpatía de los estudiantes ¿A qué le teme?

La competencia siempre es buena y dejarla participar además demostraría que no se le pone el pie a las mujeres que buscan espacios, ahora que en todos lados se habla del tema de igualdad.