A LA BÁSCULA  

Suelas y saliva

 Decía un viejo refrán popular que ‘el que tiene más saliva traga más pinole’, pero había otro más que era como su especie de contraparte, ‘otro que se ahogó por tragar pinole a puños’. Algo así está sucediendo en las campañas para la renovación del congreso local en Coahuila.

Debido a la pandemia y a las disposiciones sanitarias para poder realizar sus actividades proselitistas, los candidatos en lugar de los multitudinarios mítines a los que se recurría en antaño para mostrar el tamaño del músculo; quien lograba reunir al mayor número de personas, se suponía, tenía mayor poder de convocatoria y como consecuencia de ello mayores posibilidades de llevar a electores a las urnas para que le favorecieran con el voto.

Ese viejo estilo de hecho desde hace algunos años ya muy desgastado, se empezaba a dejar de lado, sobre todo con el surgimiento y masificación de las nuevas tecnologías, y entonces muchos empezaron a apoyarse principalmente en las redes sociales, sin dejar de lado a los llamados ‘medios tradicionales’ de comunicación.

En esta ocasión, como parte de las recomendaciones de que no se realicen reuniones donde haya más de 20 personas, eso significa que quienes aspiran a alcanzar una curul en la próxima legislatura, tienen que gastar más las suelas de sus zapatos y una buena cantidad de saliva para ir replicando de grupo en grupo, el mensaje con el cual pretenden convencer a los ciudadanos de que les otorguen su voto.

Sobre todo, aquellos que no tienen una trayectoria política y que no están en el conocimiento del electorado, deben multiplicar sus actividades para lograr una presencia entre los ciudadanos. Hay algunos casos en los que debido a que ya han ocupado puestos públicos antaño, son más identificados por los potenciales votantes.

Hablando de los distritos que tienen cabecera en La Laguna, en el caso del PRI, los nombres de Eduardo Olmos Castro, Shamir Fernández Hernández, Raúl Onofre y Jorge Abdala Serna –por el lado de San Pedro-, tienen ya una mayor presencia ante el electorado, aunque ello no es garantía de triunfo, porque hay quienes tienen presencia, pero ésta es negativa, como es el caso de Onofre, a quien muchos responsabilizan debido al mal papel que desempeñó como alcalde, de que su partido haya perdido la alcaldía de Matamoros.

Con un poco menos de presencia están Hugo Dávila Prado y Olivia Martínez, con una enorme diferencia: que el primero ha realizado un trabajo a ras de cancha durante varios años con la gente del distrito por el cual aspira a convertirse en diputado, tiene simpatía con la gente y gracias a su trabajo de campo tiene posibilidades de alcanzar su objetivo; mientras que la segunda enfrenta para empezar serios problemas internos, ya que se ha conflictuado con todo lo que se mueva hacia el interior de su partido, al grado que muchos la consideran ‘el rival más débil’ de entre las propuestas tricolores.

Por el PAN los nombres de Gerardo Aguado, Fernando Izaguirre, Maru Cázares y Ángela Campos, unos en mayor y otros en menor proporción, pero están en el conocimiento de la gente. Los tres primeros incluso, integran la lista de cuatro diputados locales en funciones, que van en busca de la reelección.

Por Morena acaso Ignacio Corona que viene de una regiduría en el cabildo torreonense, y Bety Granillo, luchadora social de hace algunos años, pudieran estar en ánimo de la gente, aunque el primero sin mucha presencia con la gente; y la segunda, de los nuevos electores quién sabe si la sigan identificando porque ya tenía varios años alejada del ambiente político. Y todavía habría que esperar si les ratifican sus candidaturas, debido a la impugnación que se hizo de todas las propuestas de Morena en el estado, debido a las pugnas internas del partido oficial.

De ahí en más, por el Distrito VII Jesús Contreras Pacheco por el PRD y Abundio Ramírez por PRC, quizá sean los nombres más conocidos.

Del resto de los partidos –son 11 los que tienen registro en el Estado-, la mayoría de los candidatos son personas a las que la gente poco o nada identifica. Ciertamente pueden ser los rostros nuevos que esperan los ciudadanos, pero su casi total desconocimiento los puede dejar al margen de los primeros lugares en cada uno de los distritos.

Pero aun así, conocidos o desconocidos, hoy los candidatos tienen que gastar más suelas y saliva, si es que quieren llegar a los electores de sus respectivos distritos. Puede ser que el que tenga más saliva trague más pinole, aunque si a algunos se les pasa la mano, se nos pueden ahogar ‘por tragar pinole a puños’.

 

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@JulianParraIba