DE BUENA FUENTE

Cuentas mochas…

El gobierno federal jamás va a reconocer la propagación de casos de coronavirus en el país, por el simple hecho de que cuando lo haga, Estados Unidos ordenará el cierre de sus fronteras con México.

Esa es la verdadera razón por la que el presidente Andrés Manuel López Obrador prefiere frivolizar el tema sanitario, antes que  reconocer la incapacidad del sector salud para responder a la pandemia del Covid-19.

Y es que el cierre de fronteras con Estados Unidos ocasionaría enormes pérdidas económicas para el sector productivo de ambos países, pero especialmente para los connacionales.

No en balde, los estados fronterizos de México con Estados Unidos refieren un bajísimo número de casos del Covid-19.

Tamaulipas reporta apenas un caso de contagio, al igual que Chihuahua y Coahuila, en tanto Sonora y Baja California, hasta el momento se mantienen sin personas enfermas de coronavirus.

El prietito en el arroz es Nuevo León que supera cuatro personas contagiadas del virus chino, y que se encuentran en cuarentena.

Es por eso que autoridades de salud de Estados Unidos sospechan que el gobierno federal oculta a propósito la propagación de la pandemia entre los mexicanos, para evitar restricciones del país vecino a productos y personas procedentes de este país.

El cierre de fronteras entre México y Estados Unidos es un peligro latente, y el gobierno mexicano  lo enfrenta minimizando la presencia del Covid-19 entre la población. A ver cuánto les dura el cuento.

Llamado a tiempo…

La diputada local Zulmma Guerrero puso el dedo en la llaga al señalar la necesidad de diversificar el sector productivo en la región carbonífera para dejar de depender de la venta de carbón a la CFE.

La legisladora sabinense hizo un llamado a los gobiernos federal y estatal, para generar alternativas de desarrollo empresarial y comercial en Sabinas y poblaciones vecinas, para evitar la dependencia en la producción del mineral negro.

Y es que Zulmma dice y dice bien, que el carbón ha dejado en países del primer mundo de ser una alternativa viable para la creación de energía, y que tarde o temprano, la región carbonífera deberá abandonar esta vocación productiva.

Ojala le hagan caso…

Viene, viene…

Parece ser que el Presidente Andrés Manuel López Obrador mantiene su deseo de acudir en Ramos Arizpe a la conmemoración del Plan de Guadalupe, promulgado por Venustiano Carranza. Hay que ir…