Las agencias humanitarias aceleran la entrega de ayuda a los damnificados en Mozambique

 (Xinhua/Nie Zuguo)  

El ciclón Kenneth afectó a 163.000 personas y destruyó casi 35.000 viviendas, además de dañar cientos de construcciones, entre ellas escuelas y centros de salud en Mozambique. Los organismos de la ONU que operan en el país aprovechan una pausa de las fuertes lluvias para apresurar la distribución de asistencia vital a los siniestrados.

Los cuatro días que siguieron al paso del ciclón Kenneth por Mozambique fueron de precipitación continua pero este martes las lluvias han cesado momentáneamente en Pemba y el personal humanitario de la ONU ha podido acelerar la preparación de los vuelos que llevarán ayuda a la isla de Matemo, una de las áreas más afectadas por el meteoro.

Las cifras preliminares indican que el fenómeno se cobró la vida de 38 personas, que los damnificados sumarían más de 163.000 y que al menos 35.000 viviendas fueron destruidas, además de que habrá que reconstruir unas 200 aulas escolares y 14 centros de salud.

En las islas Comoras murieron al menos cuatro personas y las autoridades han solicitado asistencia internacional para afrontar la destrucción.

Por ahora, cerca de 24.000 afectados se albergan en centros improvisados en Mozambique luego de que sus comunidades fueran gravemente dañadas por el ciclón. De acuerdo con el personal de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Ayuda Humanitaria (OCHA) que sobrevoló el área para hacer una primera evaluación del siniestro, algunos pueblos están complemente devastados.

La ONU liberó 13 millones de dólares de su Fondo de Respuesta de Emergencia para iniciar la distribución de alimentos, agua, medicamentos y suministros básicos, así como servicios de salud y saneamiento, tanto en Mozambique como en Comoras.

Sin embargo, esos recursos son insuficientes, por lo que OCHA llamó a la comunidad internacional a apoyar el Plan de Respuesta Humanitaria para Mozambique, que precisa 337 millones de dólares y que ha obtenido apenas un 30% de esa cantidad.

Las previsiones meteorológicas indican que las lluvias continuarán en los próximos días, lo que obliga a los trabajadores que evalúan los perjuicios y las necesidades más urgentes de la población afectada a actuar con la mayor rapidez posible, informó OCHA.

Ayuda alimentaria

El Programa Mundial de Alimentos, por su parte, trabaja en coordinación con las autoridades mozambiqueñas en la primera fase de un plan de emergencia alimentaria que asistirá durante tres meses a las comunidades más necesitadas.

“Hasta ahora, el PMA ha llegado a 11.500 beneficiarios después de la entrada del ciclón Kenneth en la provincia de Cabo Delgado, en el norte de Mozambique. El número de personas asistidas aumentará pronto”, dijo el portavoz en Ginebra de esa agencia, Hervé Verhoosel.

Los primeros operativos del PMA ocurrieron el sábado, cuando su personal repartió 577 toneladas de comida que se encontraba almacenada en Macomia, una zona que también resultó muy afectada y a la que se muy difícil acceder dada la destrucción de los caminos, detalló el portavoz.

Este martes, el PMA envió casi 3 toneladas de galletas de alto contenido energético al área de Quissanga en un vuelo que también transportó una tonelada de comida enviada por el gobierno y 100 kilos de medicinas y artículos de higiene aportados por otros organismos de ayuda.

Las islas de ibo, Matemo y Quirimba también recibirán cargamentos de víveres en una operación conjunta del citado Programa con equipos de rescate sudafricanos.

Impacto en la agricultura y los alimentos

Las primeras evaluaciones revelan que la destrucción causada por el ciclón tendrá un impacto nefasto en la agricultura, el sustento de muchas familias y la situación de la seguridad alimentaria y nutricional en Mozambique.

“En las áreas más afectadas la gente perdió todo, incluidas sus casas y lugares de trabajo, como las pesquerías, que son la principal forma de ganarse la vida en la costa. También los cocoteros, que constituyen un bien muy importante para esas comunidades, fueron arrasados”, apuntó Verhoosel.

Más de 31.000 hectáreas de cosecha se perdieron ya que el ciclón llegó en el punto máximo de la temporada de cosecha.

Lo peor de todo es que las lluvias pronosticadas para los próximos días empeorarán las inundaciones y dañarán más los caminos, complicando aún más la entrega de auxilio.

El PMA trabaja desde hace tiempo con las autoridades mozambiqueñas en el diseño y construcción de presas y sistemas de irrigación para aumentar la resiliencia del país frente a los eventos climáticos.

El ciclón Kenneth se presentó apenas seis semanas después de que otro meteoro, el Idai, causara cerca de 1000 muertes. UNICEF solicitó 122 millones de dólares para ayudar a los niños y sus familias en Mozambique, Zimbabue y Malawi. (ONU NOTICIAS)

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Agencias