Desde hace tres años, la Estancia y Café Flor y Canela realiza la campaña Café Pendiente, misma que consiste en el pago voluntario del cliente de bebidas calientes a precio especial para ser entregadas a personas de bajos recursos, ancianos o en situación de abandono.
«La verdad es que hemos tenido una muy buena respuesta de los clientes y de nuestros seguidores. En esta época todo mundo quiere ayudar un poquito más. Es una iniciativa que inició en Italia y se ha expandido por todo el mundo», indicó en entrevista con El Heraldo, Berenice Meza, propietaria del concepto.
Gracias al éxito del admirable proyecto, se dio paso a la segunda campaña denominada Comida Pendiente, que funciona con la misma dinámica que la anterior pero esta vez involucrando alimentos que se preparan en el mismo establecimiento ubicado en dos sucursales: Juárez 257, en el corazón de Saltillo; y en bulevar Musa de León 861.
«Nunca habíamos contemplado lo de las comidas pendientes porque lo que es conocido es lo del café pendiente y la verdad es que la persona que viene, y que nosotros vemos que tiene una situación complicada le regalamos la comida»; comentó.
ALTO IMPACTO
Tal ha sido la participación de los comensales que asisten a Flor que las campañas, con las que se han entregado al menos 400 cafés y 60 comidas, ha sobrepasado las barreras locales, ya que gracias a la visita de una familia Rarámuri, esta acción se dio a conocer a nivel nacional e incluso han llegado donativos de otras partes del país, como Monterrey y Guadalajara, para darle comida y bebida a más personas.
«Viene una familia Rarámuri. Ellos vienen cada cierto tiempo en Saltillo y salen todo el día a vender su artesanía. Una vez me los encontré en la calle y los invité a comer a mi casa y a partir de ahí hicimos la amistad. Cada que vienen al café les ofrecemos comida. José y Elvira tienen dos niños, es bien bonito porque los mismos clientes nos dicen que quieren regalarles la comida», platicó.
Berenice Meza, una apasionada de las causas nobles, invita a apoyar a Café y Comida Pendiente, sobre todo en esta época decembrina, muy propia para dar y solidarizarse con el prójimo.
«Son pequeños actos de amor que al final se traducen en acciones para apoyar a los demás. Cada que alguien paga un café le damos un gis para que lo marque, y cada que entregamos un café le damos a la persona el gis para que lo marque, igual con las comidas. Es algo que no nos cuesta mucho y es ver que todavía hay gente que quiere apoyar y compartir lo que tenemos con los demás». (OMAR SOTO)
Autor
Otros artículos del mismo autor
COAHUILA21 febrero, 2025Se salva la Narro de una nueva huelga del SUTUAAAN
COAHUILA21 febrero, 2025Dará OFDC concierto en el Soler con la “última” de Brahms
COAHUILA21 febrero, 2025Busca Secretaría de Defensa Nacional incorporar a sus filas a originarios de estados del norte de México
COAHUILA21 febrero, 2025Reforzará UA de C promoción de carreras con baja demanda estudiantil