DERECHO POLÍTICO; EL REFLEJO SOCIAL E HISTORIA DE AMOR

“Me doctoré en tus labios de ocasión, en una sórdida pensión de Leningrado”. Así comienza una canción de Joaquín Sabina, la cual nos transporta a una historia de amor que se cruza en dos momentos históricos diferentes; antes y después de la Unión Soviética.

Imaginar, es una herramienta maravillosa que nos permite reconstruir historias, mezclarlas con la realidad, y en ocasiones viajar a un probable futuro; lo que muchas veces nos sirve anticiparnos a los desafíos de la vida, y en otras errar por coincidencia.

Hay lluvias Saltillenses, que te permiten construir imaginarios a la luz de la lectura, Nos quedaba para un vodka con limón, y un tostón del menchevique de la esquina cuando agonizó el palique, qué ansiedad, te empecé a desabrochar la gabardina” sigue dictando la canción del cantautor español, mientras nos hace pensar en aquellos amores inolvidables.

Identificar el momento histórico en el cual nos encontramos es complicado, si no hemos leido o escuchado lo suficiente sobre el pasado; pues gracias a él, tomamos la experiencia propia o ajena; y la usamos como amuleto para prevenir las desgracias, o crear el caos aparentemente controlado.

La mejor forma de transportarte a otras mentes, tiempos y espacios es leyendo: el Prof. Oskar Georg Fischbach, fue un jurista y político alemán, funcionario en el Tesoro del Reich y miembro del Tribunal de Estrasburgo; participó en la construcción de varias leyes oficiales de la Alemania Nazi.

Derivado de la fortuna de una tarde lluviosa, a la que me vi forzado por desamor, obtuve un ejemplar de segunda edición (1934) del libro titulado “Derecho Político General y Constitucional Comparado”, de dicho autor, llegó a mis manos con una firma de la dueña anterior (Gloria Izquierdo Alibaña) fechada a 1940 (quiero imaginar que leyó el libro en ese año, pues en él hay un recibo del Instituto Científico y Literario Autónomo de San Luis Potosí con fecha 4 de marzo) ciudad en la que por cierto, el templo de San Agustín guarda especial belleza, al menos en mi memoria.

En ese texto, se hacen reflexiones alrededor de la Teoría del Estado, la Constitución de Weimar, y las formas de organización política. Por ejemplo, plantea grandes preguntas “¿Ha de entenderse por <Pueblo> la totalidad de los habitantes de un país, o sólo los ciudadanos y exclusitamente los que tienen derecho de voto” y aún suponiendo que éstos sean los únicos representados ¿no deben los diputados velar también por los intereses de los demás?

Frenéticamente y en otro tiempo, Sabina seguía cantando Tú con tu boina, yo con barba, viva El Che, recién conversos a la fe del hombre nuevo, no había caído el Muro de Berlín, ni reventado el polvorín de Sarajevo” con lo cual refleja la esperanza o moda que representaba la izquierda en aquellos años. Además, en la relatoría romántica de la canción, se refiere a una pareja de jóvenes idealistas y revolucionarios: dispuestos a cambiar el mundo entre los dos, a enfrentar y derrocar cualquier régimen tiránico, por ejemplo en una escuela.

En torno a los órganos del Estado y la representación, Fischbach, afirmó un especial matiz tocante en el Poder Judicial, en ese libro publicado por primera vez en 1928 (hace 96 años) que en los Estados Republicanos (como Estados Unidos) “los Jueces se nombran por sufragio popular, y no se hayan sujetos a otro poder”. No perdamos de vista el contexto.

Luego explica, que en cambio en donde se encuentran sujetos al soberano que los nombra, quedan sometidos al Monarca que los impone, es decir, la justicia se hace en nombre del Rey a diferencia de las Repúblicas Democráticas, donde “la justicia se administra en nombre del Pueblo.”

Investigando un poco, podemos advertir que las afirmaciones casi centenarias del Alemán, siguen teniendo algo de vigencia; aunque el sistema judicial americano es mucho más complejo,  pues cada uno de los 50 estados de la Unión tiene su propio y particular modelo judicial, distinto además del sistema federal lo que se manifiesta en una diversidad de métodos de selección de los aspirantes a la judicatura, los cuales son analizados en un estudio de la Universidad de Valencia por Rosario Serra Cristóbal (2023).

Cincuenta rublos era un Potosí, y tú, desnuda, un maniquí de grana y oro, nos dieron llaves de la suite nupcial, que era un cuartucho de hospital, sin inodoro” Sigue cantando en otro contexto Joaquín, también conocido por ser un poeta y pintor. Como aquella musa Asturiana,  italo-española y mexicana; que caminaba por el Centro o por Madrid, sin distinciones sociales; la comodidad se encontraba en la compañía y complicidad intelectual.

Ilustrando la diversidad actual de selección judicial en Estados Unidos, en el estudio previamente referido, cuyo nombre es “LA SELECCIÓN DE JUECES EN ESTADOS UNIDOS: LA SINGULARIDAD DE UN MODELO DUAL Y DIVERSO”; se muestran distintos tipos de procesos, distinguiendo la selección federal, la estatal, aquella en la que son elegidos por el cuerpo legislativo, la elección de los jueces por el gobernador; y las que más llaman mi atención; en primer término la elección democrática de los jueces; y en segundo término la elección partidista de los jueces.

Dado el contexto actual en México, en el que se especula una reforma constitucional en 2025, para que los ministros, magistrados y jueces sean electos por voto popular. Cobra especial relevancia que el gremio jurídico estudie las ventajas y desventajas de las elecciones abiertas de los jueces; y sus modalidades. Ello impactará el futuro de nuestra nación (imperio, democracia, reich o como le quieran llamar).

Ayer salías, morena, de un café, ya casi medio siglo que no te veía; eras rubia, si no recuerdo mal, y dije mintiendo: «estás más guapa, todavía»: Aquí Joaquín Martínez, quien es más conocido por su segundo apellido; relata en su canción como se encuentra con su amada (o lo que puede reconocer de ella), ya después de la caída de la URSS; en un mundo que para bien o para mal ha cambiado bastante.

Definitivamente, la vinculación entre el Derecho y la Política es muy estrecha, pues el derecho crea el universo imaginario mediante el cual se ejerce la política; y muchas veces la política designa el destino de quienes crean el derecho. Transitando de izquierda a derecha; y al revés.

El dictador borra siempre las fronteras entre los poderes del Estado”: fue la frase más impresionante que encontré, en ese libro antiguo, publicado por primera vez en 1928 y escrito por Fischbach, paradójicamente; un Jurista Nazi. Que en aquel entonces analizaba lo siguiente: “El artículo 48 de la Constitución alemana confiere al Presidente del Reich el derecho exclusivo a declarar el “estado de sitio” por tanto en lo futuro, ninguna autoridad militar podrá dejar en suspenso los derechos fundamentales”.

Sabina, mientras tanto, en el otro contexo; y bajando el tono musical cantaba: “Me aceptaste una cerveza sin alcohol, se nos había muerto el sol en los tejados; funerales, y con nada que decir vi en tus pupilas un añil mal dibujado”. con lo cual se evidencían los contrastes entre el primer encuentro de la pareja; el de la juventud revolucionaria en la Unión Soviética y el de la madurez insípida o burocrática que fue matando la relación; aunque el amor persista en otra forma.

Mientras tanto, en otro tiempo y espacio que se dieron, el Profesor Alemán seguía reflexionando, obsesionado en su trabajo: “El apartado 4º del mismo artículo resuelve la cuestión tan discutida de si los gobiernos federados tienen facultades para proclamar ese <estado de exepción>, reconociendoseles competencia para adoptar dentro de su territorio las medidas necesarias en caso de “peligro inminente”, con sujeción al artículo 48; pero reservando al Presidente del Reich el derecho de revocarlas”.

Indagando un poco más, encontré la Constitución del Weinar, cuyo preámbulo también es una declaración: “El Pueblo alemán formando una unidad moral superior por encima de la variedad de sus grupos aborígenes y, por tanto, de la voluntad de renovar y consolidar su Imperio, en la libertad y la justicia, servir la paz interior y exterior y fomentar el progreso social se ha dado asimismo la siguiente Constitución… “

Siguiendo con la historia de amor: Joaquín Martinez Sabina, cantaba en un día muy especial: No sé por qué sigo escribiendo esta canción, pero me sangra el corazón cuando lo hurgo; supe que te casaste con un juez; y Leningrado es, otra vez, San Petersburgo.” A manera de despedida, y bajo la resignación de que a pesar de querer estar hoy en Leningrado; la revolución falló; y aquel lugar ya no le pertenece al protagonista de la canción; pues sólo existe en el pasado, y efímeramente en algunos recuerdos o columnas caídas.

Otro dato curioso, es que la Constitución de Weinar, en sus artículos 7 y 156: contemplaba las facultades económicas del estado; y mediante los numerales 101 al 108 regulaba la administración de justicia, mediante la cual, disponía entre otras cosas: “los jueces son independientes y no están sometidos más que a la ley”. Retomando las ideas del propio Fischbach, podemos afirmar que donde hay equilibrios de poder, no hay dictaduras.

Lo final es concluir, lo importante del contexto en todo; en las leyes, en la música y en el amor. Derecho Político y General Constitucional Comparado: es una obra de Fischbach, quien se afilió al Partido Nazi en 1933, la cual era leida por una abogada de San Luis en 1940; y que llegó a mis manos en 2023. En ella se exploran temas relativos a la elección popular de jueces. Hoy debemos estar interesados en las posibles reformas al Poder Judicial, pues el derecho político no es más que el reflejo social. No hay que perder el derecho o el amor por ser político, ni perder la política o el derecho por amor. “Porque la revolución tenía un Talón de Aquiles al portador y flotando entre las ruinas enviudó una golondrina en mi balcón”

 

Juan Manuel González Zapata, abogado egresado de la Facultad de Jurisprudencia, y sólo por hoy; Poeta. Saltillo, Coahuila de Zaragoza, México a 12 de Junio de 2024.