VIVIR ES AHORA

Tu resistencia: El enemigo Silencioso de tu mejor versión

¿Qué te impidió desatar la magia que llevas dentro y alcanzar todo lo que deseabas este año?

Algunos encuentran respuestas en lo externo: en las personas que le rodearon, en la economía, la salud, los cambios políticos o incluso climáticos… Y dejan de lado una parte interna que, independientemente de las condiciones externas, se convierte en el ladrón de sueños más experto y a menudo invisible: la resistencia interna al cambio.

Cada uno de nosotros es un canal por el cual fluye la energía generadora de nuestras condiciones. Esta energía se canaliza a través de nuestras emociones y pensamientos dominantes.

Por lo general, cuando vivimos un estado interno que se encuentra en sincronía con nuestros deseos más profundos, esta energía fluye y nos permite generar los pensamientos y emociones que desencadenarán acciones y actitudes adecuadas para lograr nuestros objetivos, de manera inconsciente.

Sin embargo, también existe una parte de nosotros, en nuestra mente inconsciente, que almacena recuerdos de dolor, traumas y creencias limitantes, que se resiste al flujo libre de esta energía. Esta resistencia puede ser generada a través del miedo a lo desconocido, o la necesidad de controlar, o por apego a lo familiar.

 

Existe una verdad universal: todo está en constante cambio y transformación.

 

Nos enseñaron el camino de la seguridad, mas no el de la felicidad. Y esa felicidad se encuentra en el camino del crecimiento, a través del cambio. Bajo este aprendizaje, pretendemos que las cosas se queden estáticas, sin moverse, aferrándonos a lo conocido y a lo cómodo, y evitando cualquier dolor que pueda surgir de dejar ir, o de cambiar.

¿Y qué pasaría si permitieras que la vida te sorprenda? Imagínate abriendo las puertas de tu mente y corazón, diciendo: “Universo, sorpréndeme con el siguiente regalo”. ¿Cuáles resistencias aparecerían en tu vida? ¿Qué temes perder? ¿Qué incomodidades decides evitar? ¿Qué dolores te rehúsas a enfrentar?

Es interesante notar que, muchas veces, sufrimos más en nuestra imaginación que en la realidad. De hecho, el 99% de las cosas que anticipamos nunca suceden. Sin embargo, nuestro cerebro se aferra a la posibilidad de ese 1%, esforzándose en predecir y evitar lo que puede llegar a dolernos y que, todavía no sucede o, tal vez, nunca llegue a suceder.

Y en lugar de experimentar la vida en su forma más pura y auténtica, nos dedicamos a construir muros de protección que limitan nuestro potencial.

 

¿Qué pasaría si usaras la mitad de la energía que despilfarras en protegerte y generar ansiedad, para crear en su lugar eso maravilloso que siempre has deseado?

 

Cuando nos resistimos al cambio, generamos ansiedad. Y nos encontramos tratando de agradar a los demás, controlando las situaciones y aferrándonos a lo que creemos que nos da seguridad; eso nos deja exhaustos, ¿no es así?

¿Y si te dijera que, las crisis que experimentamos ya sean emocionales, laborales o personales, son mecanismos de la vida para liberar esas resistencias? ¿Con qué actitud las enfrentarías ahora?

Tu propósito vital es sentir la vida, disfrutar de ella, y divertirte en el proceso. Cada desafío que enfrentas en este viaje es inmensamente valioso y contribuye a tu crecimiento y evolución. Entonces, ¿qué te impide enfrentar los retos con confianza? Con confianza en la vida, en Dios, en ti mismo…

La confianza no es el conocimiento absoluto de que todo saldrá bien; consiste, más bien, en tener la seguridad de que contamos con los recursos para generar nuevas cosas y para enfrentar cualquier reto que se nos presente o, en su defecto, que podemos crecer para aprender y generar esos recursos.

En muchas ocasiones, lo mejor que te ha sucedido llegó a tu vida cuando no lo esperabas ni lo buscabas. Estas maravillas surgieron cuando confiabas, en lugar de estar obsesionado por alcanzar un resultado específico. Porque tu mente está diseñada para confiar.

Siempre estamos confiando en algo. El problema es que, en ocasiones, confiamos en las cosas equivocadas, como confiar en que nos irá mal, en que nos van a traicionar, en que perderemos el dinero, el status, o nuestra vida…

Cuando confiamos en la cosa equivocada o en las creencias limitantes, comenzamos a dudar de nuestra valía y capacidad. Y, al estar enfocados en eso, nuestra mente subconsciente se encargará de traerte experiencias que reflejan tus pensamientos y creencias dominantes, incluso si te limitan.

 

Entonces, ¿en qué decides confiar a partir de hoy?

 

En este cierre de año, date un tiempo para reflexionar sobre tus resistencias, y toma decisiones conscientes sobre lo que quieres llevar contigo hacia el nuevo año. Porque la vida es un viaje que merece ser vivido con toda la intensidad posible; entonces, no te limites a sobrevivir, ¡vívelo!

 

coachteylealg@gmail.com