Este lunes, automovilistas que circulaban por el bulevar Miguel Ramos Arizpe en su conexión con la carretera Los Pinos se toparon con un inusual embotellamiento, mucho más severo de lo habitual. La causa: la sorpresiva instalación de más de 160 boyas alineadas en cuatro hileras a lo largo de la vía.
De acuerdo con el Ayuntamiento de Ramos Arizpe, los topes fueron colocados durante la noche del domingo por particulares relacionados con una gasolinera ubicada en el área, sin haber solicitado previa autorización. La acción provocó que el tránsito hacia el norte de Ramos Arizpe se volviera lento y complicado durante algunas horas.
Ante la denuncia ciudadana, el Ayuntamiento ordenó de inmediato el retiro de los reductores de velocidad, al considerarlos una medida ilegal y riesgosa que podría ocasionar accidentes.
Cabe señalar que en esa zona ya existen dispositivos luminosos que advierten a los conductores sobre la curva y el puente del bulevar Manuel Acuña, sin contemplan nuevas adecuaciones preventivas.
La administración municipal adelantó que se investigará a los responsables de esta intervención sin permiso, y en caso de confirmarse la falta, se aplicarán las sanciones económicas correspondientes. (EDUARDO SERNA)
