FILÓSOFOS Y CHIFLADOS

Nos sentimos muy modernos, pero a excepción de la autodenominada Cuarta Transformación (4T) que gobierna con frases mentirosas para ocultar ineptitud y corrupción, usamos muchas que acuñaron hace siglos ilustres pensadores griegos.

La 4T llama “percance de vía” a los accidentes del Tren Maya por la mala calidad de los materiales empleados.

“Eventos” a los baches, hoyancos, que causan corajes y daños a choferes y vehículos y se han vuelto característica del país.

“Fallitas que se corregirán” al desabasto durante años, de medicinas.

“Listas orientadoras” a las trampas electorales.

“Democracia a plenitud” a tener poderes Legislativo y Judicial sin autonomía.

“Transformación que avanza” al desmantelamiento de lo que tanto nos costó formar.

“Vamos bien” al desastre violento en que vivimos.

“Excelentes y productivas conversaciones” a las exigencias de Trump.

“Crimen organizado” a los narcos que le dan dinero y a cambio protege con “abrazos y no balazos”.

“Soberanía nacional” a la defensa que la presidenta Claudia Sheinbaum hace de ellos.

“Justa medianía” a las millonadas transadas por legisladores y funcionarios.

“Purificación” al paso de ratas de otros partidos al Movimiento de Renovación Nacional (Morena).

No hay robos de dinero público, sino “desvíos”.

Y es “solidaridad” y no ilegalidad, dar a escondidas miles de millones de pesos a la dictadura cubana.

Llaman “becas del Bienestar” a las dádivas para comprar votos.

“Reempaquetado” a la quema de libros.

“Afectaciones” a las cotidianas inundaciones por el pésimo estado del drenaje.

“Fallas técnicas menores” a los cierres de estaciones del Metro por falta de mantenimiento.

“Bastones de mando” a la imbecilidad de que todo el que asume un cargo público, debe ser ‘horneado’ con humo de Copal.

“No lo permitiremos” a lo que ya sucede frente a sus narices; como el multimillonario robo de gasolina, huachicol, y la cauda de asesinatos que involucran a la Secretaría de Marina.

“Pueblo sabio y bueno” a sus seguidores llamados también por López Obrador “animalitos a los que hay que alimentar”.

“Libertad de expresión como nunca antes” al acoso a periodistas como Héctor de Mauleón y Carlos Loret, a los que se quiere encarcelar por el “daño moral” que sus artículos sobre la impunidad de morenistas ladrones causaron a la “buena fama” de los balconeados.

Seguramente éstas y otras frases de todos conocidas, no perdurarán como las sentencias griegas que forman parte de nuestro diario hablar.

A ellas dedicó Pablo Lafuente Cordero, un artículo del pasado noviembre en El País y de ahí tomé algunos de los siguientes datos:

Alma gemela, procede de la narración que hace Aristófanes en El banquete de Platón, sobre la orden de Zeus a Apolo para que partiera por la mitad a cada individuo, condenándolo a buscar por siempre su otra mitad, su media naranja.

Diógenes de Sinope (412-323 a C.) está ligado a la palabra cínicos, kynikós, que significa perruno y recuerda cuando para mostrar su desprecio, orinó en un plato con huesos que le aventaron para humillarlo.

Síndrome de Diógenes erróneamente califica a los acumuladores, porque él despreciaba lo material.

Amor platónico equivalía a la armonía que Pitágoras (569-475 a C.) relacionaba con la melodía que produce el movimiento de los planetas.

Estoicismo escuela filosófica fundada en el siglo III a.C. por Zenón de Citio, sigue significando que es posible alcanzar la libertad, siendo indiferentes a lo material y acontecimientos negativos.

Y seguimos llamando hedonismo, a la búsqueda del placer.

Los conceptos griegos han tenido fundamental importancia en nuestro pensamiento y los cuatro principios de la naturaleza, arché en griego, han estado vigentes en Occidente durante siglos.

Tales de Mileto dijo que era el agua, Heráclito el fuego, Jenófanes la tierra y Anaxímenes el aire.

Aristóteles agregó el éter, recuperado por físicos del siglo XIX para denominar lo que no vemos, pero llena el universo.

Con los años, la Ciencia ha descubierto otros y hoy son 118.

Wikipedia dice que Hipócrates usó esos 4 primeros elementos, el agua a la vez fría y húmeda, la tierra seca y fría, el fuego caliente y seco y el aire húmedo y caliente, para describir los 4 humores del cuerpo humano: flema, bilis negra o melancolía, bilis amarilla y sangre.

Y en 1987, el compositor Robert Steadman escribió una sinfonía en la que cada movimiento representa las características de esos 4 principios de la vida.

Muy interesante es todo esto y muy lejos de la anticiencia que rige al ignorante, rencoroso y autoritario gobierno que tenemos.

Cuyo comportamiento comprendí mejor este 3 de septiembre, al leer que la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que una de cada 7 personas, más de mil millones en el planeta, sufre algún trastorno mental.

Y ¡aguas! porque la OMS alertó que el actuar de esos enfermos, tiene “consecuencias múltiples y alarmantes” y acá viven algunos de esos millones y mantenemos obligada relación con Trump, otro de los chiflados.