LOS INDIOS LAGUNEROS

En la colaboración anterior dimos a conocer que el poeta y cronista, don Gaspar de Villagrán, llamó a los naturales del norte del país “los bravos bárbaros gallardos”, debido principalmente al hecho de que nunca aceptaron someterse a los conquistadores  españoles, pues los mismos prefirieron irse a vivir a las serranías existentes en el área en que vivían, y lo que es más, preferían extinguirse completamente antes de ser sometidos  a la autoridad de los ibéricos.

Según las afirmaciones de don Vito Alesio Robles en su magnífica obra histórica “Coahuila y Texas en la Época Colonial”, nos ha dado a conocer que los grupos de indígenas que incursionaron en diversos poblados comarcanos fueron, entre otros, los  tarahumaras, tobosos, apaches, conchos y tepehuanes, los que al igual que otros grupos que radicaban en la región,  participaron activamente  en las múltiples incursiones  que llevaron a cabo los llamados “indios bravos bárbaros gallardos de La Laguna” , los cuales atacaron cualquier poblado en el que existían españoles.

Las incursiones de los indios del norte trajeron como resultado, en algunos casos, la desaparición de poblados enteros recién fundados, ya que los naturales causaban  verdaderas depredaciones en los centros de población que atacaban. Entre las poblaciones laguneras del estado de Durango que padecieron con mayor intensidad los ataques de los irreductibles indios naturales, podemos señalar a Santiago de Mapimí, San Juan de Casta y la Misión de los Cinco Señores (Nazas) y entre los poblados coahuilenses que sufrieron los ataques podemos señalar a San José y Santiago del Álamo y San Juan Nepomuceno de la Carrera.

Santiago de Mapimí fue de las poblaciones que más padecieron de  invasiones  y ataques  a partir del año de 1648, cuando indios tobosos lo invadieron, logrando la distracción parcial de tal poblado,  señalando los historiadores  que en el año de  1652 hubo otro gran ataque por parte de tarahumaras, en 1715 corespondió a indios cocoyomes y tobosos atacar Mapimí, en donde murieron más de 100 españoles y 300 criollos, secuestrando a gran número de niños, resurgiendo el poblado gracias al  establecimiento de un presidio militar que vino a proteger a los españoles.

En los registros que se elaboraron en el año de  1598 se tenía el número de  104 indios laguneros que para tal  año se habían detectado y registrado en los libros  de bautismos y matrimonios del siglo XVII, lo que nos da una idea del gran número de indígenas que formaron parte de las tribus que existían para tales años y además confirmamos que el número de tribus que existían en la región eran de tal número, que los españoles decidieron llamarlos tribus laguneras en lugar de su nombre original para evitar confusiones.