
Ciudad de México.- ¿Buscas un entrenamiento efectivo, divertido y que puedas hacer en cualquier lugar?
Saltar la cuerda es mucho más que un juego infantil: es uno de los ejercicios cardiovasculares más completos, es avalado por entrenadores y profesionales de la salud como una forma eficiente de mejorar la resistencia, tonificar el cuerpo y quemar calorías rápidamente.
Beneficios respaldados por la ciencia
Saltar la cuerda activa grandes grupos musculares, eleva la frecuencia cardiaca en segundos y mejora la coordinación, el equilibrio y la agilidad.
“Este ejercicio combina resistencia cardiovascular con trabajo de fuerza y coordinación. Es ideal tanto para principiantes como para atletas de alto rendimiento”, explica el Doctor Edward Laskowski, codirector de la Clínica Mayo de Medicina Deportiva.
Algunos de sus beneficios
– Quema calórica acelerada: según el American Council on Exercise, una persona de 70 kg puede quemar entre 10 y 16 calorías por minuto al saltar la cuerda, lo que equivale a unas 300 a 500 calorías en 30 minutos.
– Fortalecimiento muscular integral: activa piernas, glúteos, core, hombros y brazos.
– Salud cardiovascular: mejora la circulación sanguínea, regula la presión arterial y fortalece el corazón.
– Mejora del equilibrio y la coordinación: clave para otros deportes como boxeo, baloncesto o atletismo.
¿Qué músculos se ejercitan?
Cuando saltas la cuerda trabajas múltiples zonas del cuerpo de manera simultánea, como piernas y glúteos, además los gemelos, cuadríceps, isquiotibiales y glúteos se activan con cada salto.
– Core: abdominales y lumbares estabilizan el movimiento y ayudan a mantener una buena postura.
– Hombros y brazos: los deltoides, bíceps y tríceps trabajan al girar la cuerda constantemente.
Rutina básica para principiantes
Duración total: 15 minutos.
Frecuencia: 3 a 5 veces por semana.
Calentamiento (2 minutos)
Marcha en el lugar o saltos suaves sin cuerda.
Ronda 1 (3 minutos)
Saltos básicos a ritmo lento (un salto por segundo)
Descanso activo (un minuto) Camina o trota en el sitio.
Ronda 2 (4 minutos)
Treinta segundos de saltos dobles o cruzados.
Treinta segundos de saltos básicos (repetir 4 veces).
Ronda 3 (3 minutos)
Saltos alternando pies (como corriendo en el sitio).
Enfriamiento (2 minutos), estiramientos suaves para piernas y hombros.
Consejos para empezar
– Usa una cuerda adecuada a tu altura: písala con un pie, los mangos deben llegar a tu pecho.
– Salta sobre una superficie blanda (tapete deportivo o madera).
– Mantén las rodillas ligeramente flexionadas y aterriza suavemente sobre las puntas de los pies.
– Empieza con sesiones cortas y ve aumentando progresivamente.
Saltar la cuerda es una de las formas más eficaces y accesibles de ponerte en forma.
Con solo una cuerda y 15 minutos al día, puedes trabajar todo el cuerpo, mejorar tu salud cardiovascular y acelerar el metabolismo.
Los expertos coinciden: es un pequeño gran ejercicio que merece un lugar en tu rutina. (AGENCIA REFORMA)


