Compras consolidadas
Aunque fue presentado por la presidenta Claudia Sheinbaum como ‘un nuevo mecanismo’ para la compra de medicamentos e insumos médicos con transparencia y cero corrupción, la actual administración ha vuelto a retomar el esquema de las compras consolidadas utilizado en anteriores sexenios como en los de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Durante la pasada administración federal, como en muchos otros aspectos, se eliminaron las compras consolidadas, para aparentemente lograr mejores precios y un ahorro para el erario, lo cual a final de cuentas no ocurrió, pero sí se provocó un marcado desabasto de medicamentos con el consecuente daño para los pacientes, sobre todo para los niños y los enfermos de cáncer.
A lo largo del sexenio pasado, el gobierno implementó un total de cinco modelos de compra de medicamentos, pero ninguno de ellos funcionó, y los supuestos ahorros fueron un verdadero mito, porque el gasto en la materia se incrementó 29 por ciento en relación con el gobierno anterior, pero hubo menos medicamentos en todos los hospitales públicos. Según especialistas y versiones periodísticas, se dejaron de surtir unos 15 millones de recetas.
La ‘austeridad’ del pasado gobierno provocó un gran desabasto de medicamentos y que los hospitales públicos carecieran de los insumos básicos y el equipo necesario para atender a los pacientes, además de una importante disminución en la aplicación de vacunas a los niños del país. Al final no hubo tales ahorros.
Tampoco, el sistema de salud fue como o mejor que el de Dinamarca que tanto se cacareó. También resultó ser un rotundo fracaso la creación de la ‘Farmaciota’ en la que se tendrían todas las medicinas del mundo para surtir de inmediato a los hospitales que las requirieran, aunque esta seguirá funcionando, pero sólo para abastecer principalmente a la zona centro del país.
Aunque esta medida es una vuelta al pasado, Sheinbaum Pardo anuncia que mediante este ‘nuevo mecanismo’, con la compra consolidada se busca garantizar medicamentos para los siguientes dos años, con un ahorro de 30 mil millones de pesos, y abastecerá a todos los hospitales públicos, tal y como ocurrió en el pasado.
Según la presidenta, la diferencia es que antes de la pasada administración, las compras se hacían a través de intermediarios que eran los proveedores del gobierno y se encargaban de su distribución, y ahora con esta compra complementaria bianual se hace directamente con los laboratorios fabricantes de los medicamentos.
El compromiso es que, en dos meses, es decir, en marzo, quedará resuelto el desabasto de medicamentos en los hospitales públicos. Veremos.
El anuncio fue que para el periodo 2025-2026 con el ‘Nuevo Modelo de contratación consolidada de medicamentos e insumos médicos’, se realizará la compra consolidada de 4 mil 454 claves de medicamentos e insumos médicos, “la más grande a la fecha”, con una inversión de 130 mil millones de pesos para “eficientar, transparentar y garantizar el abasto de medicinas y materiales necesarios en el sector salud”.
Con esta nueva medida, aunque no lo diga de esa manera, la presidenta elimina los esquemas adoptados en la administración pasada, y regresa a anteriores que, si no son iguales, son muy parecidos a los empleados por sus ‘némesis’, el panista Felipe Calderón y el priista Enrique Peña Nieto.
Como en el tema de la seguridad donde sin decirlo públicamente se ha venido eliminando la política de ‘abrazos y no balazos’, ahora con el rubro de la salud, Claudia Sheinbaum va dejando de lado algunas de las políticas implementadas en la pasada administración, para irle dando un sello propio a su gobierno.
Habrá otros rubros en los que paulatinamente tendrá que irle dando un viraje de acuerdo con el momento coyuntural, como en el tema de la migración, el del combate a los grupos del crimen organizado por las amenazas externas que acechan al país, y para lo cual deberá construir una unidad en su rededor, en el que será necesario contar con el respaldo y apoyo de los gobernadores de todas las entidades, más allá de colores, de siglas o credos políticos.
Claudia Sheinbaum deberá promover la reconstrucción de la paz entre todos los sectores del país, fomentar la unidad que en el sexenio pasado se ‘dinamitó’ desde Palacio Nacional. Las circunstancias actuales, hacen abrigar esperanzas de un cambio de rumbo del gobierno federal.
X= @JulianParraIba
Autor
- Es director del diario digital La Otra Plana y la revista impresa Metrópolis. En cuatro décadas de ejercicio periodístico ha trabajado en diarios como El Norte de Monterrey, La Opinión-Milenio en Torreón, Esto en la Ciudad de México y a.m. en León, Guanajuato entre otros; ha sido conductor en programas de radio y televisión. Es columnista en varios medios impresos y digitales de Coahuila y Durango.
Otros artículos del mismo autor
- OPINIÓN16 enero, 2025A LA BÁSCULA
- OPINIÓN9 enero, 2025A LA BÁSCULA
- OPINIÓN6 enero, 2025A LA BÁSCULA
- OPINIÓN19 diciembre, 2024A LA BÁSCULA