LA FUENTE DEL PENSADOR

Entre los monumentos existentes en esta gran ciudad de Torreón, uno de los más emblemáticos y apreciados por los torreonenses, sin duda, es “La Fuente del Pensador” que se encuentra en la Alameda Zaragoza, por la calle González Ortega y la avenida Morelos, la cual es un conjunto arquitectónico y escultórico que está formado por una plazoleta semicircular cubierta de mármol blanco que alberga un espejo de agua en semicircunferencia y la fuente propiamente dicha de donde emerge el agua.

El nombre con el que es conocida la fuente de la que nos estamos ocupando, se debe al hecho de que la principal escultura representa a Lorenzo de Médici, llamado también Lorenzo el Magnífico, siendo ésta una copia del trabajo escultórico que realizara el gran Miguel Ángel Buonarroti, para la tumba de la familia Médici en Florencia. La escultura es de una forma humana sedente de muy marcado estilo “manerista”, el rostro volteado hacia la derecha, la mano izquierda posada sobre su mejilla con el dedo índice abierto, la mano derecha sobre la rodilla del mismo lado, formando sus piernas una “v” o una cruz.

Es de resaltar el hecho de que los terrenos en los que se ubica nuestra gran Alameda Zaragoza, fueron donados en  1894 por un gran benefactor español que radicó en estas  tierras, el fue don Joaquín Serrano Martínez, quien se significó por su gran apego a estas tierras laguneras al haber sido uno de los primeros industriales de la región propietario de la fábrica de hilados  y tejidos de algodón  denominada “La Fe”, siendo su socio don José Farjas, la que se inició con un capital inicial de $600.00, así como también estableció la primera compañía de luz eléctrica de Torreón, esto en el mes de febrero  de 1895.

El original de la  fuente del pensador en un principio no se encontraba cubierta de mármol blanco, el mármol fue instalado por la administración de Manlio Gómez Uranga en el año de 1986, remodelando completamente a la fuente. A ambos lados de la fuente se encuentran dos esculturas antiguas en medio relieve, son figuras femeninas, una de ellas sostiene un cántaro y las dos están también elaboradas en estilo “manerista”. Todo el conjunto está enmarcado en dos columnas que pertenecían a la antigüa entrada a la alameda, la cual estaba rodeada por una barda enrejada que donara la comunidad siria-otomana.

La fuente está flanqueada por dos leones en actitud de  rugir, los mismos anteriormente  estaban a los lados  de la  escalinata del edificio de la antigua presidencia que se ubicaba  donde actualmente está el moderno edificio municipal.  Este monumento es ya un ícono, siendo orgullo de los torreonenses.