Vecinos de la colonia Landín solicitaron a la Policía Municipal de Saltillo la instalación de una caseta de vigilancia permanente en la plaza donde se encuentra ubicada la biblioteca pública de ese sector, misma que hace algunos meses fue blanco de vándalos que pintarrajearon la fachada de ese emblemático sitio.
Los habitantes del sector señalaron que dicha plaza representa un foco de inseguridad, dado que es utilizado por pandilleros que se introducen a ese espacio para drogarse e ingerir bebidas embriagantes, por lo que no bastan los rondines que efectúan los patrulleros de la corporación municipal, sino que se requiere presencia permanente de las autoridades con la instalación de dicha caseta.
Cabe mencionar que tras cometerse el acto de vandalismo en la Biblioteca Pública Landín e pasado mes de septiembre, inmueble cuya administración está a cargo de la Secretaría de Educación de Coahuila, a través de la Red Estatal de Bibliotecas Públicas, hasta el momento no se ha llevado a cabo labores para retirar el grafitti que pintaron los responsables de estos daños.
En esa ocasión, los vagos lograron su cometido introduciéndose a las instalaciones por la parte trasera de esta biblioteca cuya reja permanece abierta, a diferencia de la que se ubica en el acceso principal del edificio.
Los habitantes de la colonia Landín lamentaron el estado permanente de abandono y la falta de vigilancia en que se encuentra ese emblemático espacio, cuya construcción original, de adobe y cantera, data de finales del siglo XVIII, siendo en los años 90 del siglo pasado cuando el Gobierno del Estado lo rescató para convertirlo en biblioteca pública.
Posteriormente, en 2009 bajo nombre de Museo Capilla de Landín fue reabierto al público con el propósito de convertirlo en un punto de atracción para el turismo religioso en esta ciudad, en cuyo interior se exhibía la fachada original del recinto, así como pinturas de la época virreinal, e incluso contaba con equipo multimedia para ofrecer información a los visitantes sobre estas obras
Dicho museo permaneció abierto al público hasta 2014, cuando se determinó su cierre por motivos desconocidos, y pocos años después, volvió a abrir nuevamente como biblioteca, aunque en 2020 debido a la pandemia del COVID-19 se ordenó nuevamente la suspensión de actividades en ese espacio de lectura.
Los vecinos agregaron que desde entonces, el inmueble permanece sumido en el olvido y a merced de personas sin escrúpulos, que están en la búsqueda de una oportunidad para provocar destrozos, tal como ocurrió en aquella ocasión. (ÁNGEL AGUILAR)
Autor
- Reportero de El Heraldo de Saltillo con reconocida trayectoria en radio y prensa escrita en el estado de Coahuila.
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