SALTILLO

Contaminación por cubrebocas usados afecta también a parques más visitados por saltillenses

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22 agosto, 2021

La contaminación de cubre bocas usados que son arrojados en plazas públicas de esta ciudad, también afecta a los parques más frecuentados por los saltillenses, cuyos encargados de mantenimiento reportan también la acumulación de estos productos en las instalaciones con el consecuente riesgo de infección para los visitantes.

Mediante un recorrido por estos espacios recreativos, fue posible detectar estos cubre bocas abandonados en diferentes áreas, donde pueden fácilmente entrar en contacto con el público, especialmente por las mascotas y niños pequeños.

Los encargados señalaron que esta problemática se agudiza el fin de semana, cuando se incrementa la cantidad de visitantes que buscan esos espacios al aire libre para convivir y pasar tiempo con la familia.

“Sí nos dejan muchos cubre bocas, se les caen, se los cambian porque ya están muy usados o se los quitan para comer, pero no los ponen en los botes de basura. Lo ideal sería que los metieran en una bolsita y se los llevaran a sus casas para tirarlos allá, pero no, los avientan nada más así”, dijo un empleado del Bosque Urbano Ejército Mexicano.

“Hay veces que los avientan en la vita pista, en las palapas, en las áreas de juegos. Yo pienso que los papás deben enseñar a los niños que, así como es importante el uso del cubre bocas, también se les debe enseñar a desecharlo correctamente cuando se lo cambien, o cuando se les caiga accidentalmente”, señaló personal encargado de la caseta de entrada al Parque Las Maravillas”.

Como se ha informado, a través de este medio varios saltillenses hicieron esta semana un llamado a las autoridades de la Policía Ambiental, así como también al Subcomité COVID-19 de la Región Sureste, para solicitar que, así como se endurecieron las medidas para promover entre la población el uso de cubre bocas, también se refuercen las sanciones para aquellos que no confinen de manera adecuada estos productos sanitarios y los arrojen en la vía pública, o en parques y jardines. (ÁNGEL AGUILAR/ EL HERALDO)