Estancamiento en el crecimiento anual, aumento en los niveles de desempleo que pudiera llegar a fines de año al 4 por ciento, y la suspensión de inversión en infraestructura, son algunos de los indicadores negativos que ha mantenido hasta la fecha la administración federal, lo que ha provocado que el país siga bajando lugares en el mercado internacional, como ya ocurrió en la pérdida de ocho posiciones de México en el índice de atracción de inversión extranjera directa, elaborado por AT Kearny, consultora de gestión de capitales.
Antonio Serrano Camarena, Catedrático y Doctor en Economía, subrayó que esto se debe a que el país ha estado acumulando cifras negativas en lo que va del presente año, como la caída del gasto público en 5.6 por ciento, “más lo que se acumule en lo que falta del año”; una tasa de interés ubicada ya en 8.25 con presiones de alza de parte del mercado norteamericano, y lo más preocupante: el aumento a la tasa de inflación al 4.4 por ciento.
“Esta tasa ya no es atractiva para los inversionistas y por ello va a tener la tasa de interés una presión bastante fuerte para un aumento en las siguientes semanas”. Además, se sigue reduciendo el crédito en general lo que habla de muy poca confianza de la banca comercial que ya se prepara para una recesión económica.
Ante ello, el crecimiento económico en el país se espera al cierre de 2019 sólo en 1.6 por ciento, para el 2020 será del 1.8 por ciento; 2021 del 2.1y 2022 del 1.9 por ciento de acuerdo a los análisis económicos actuales, lo que está muy por debajo de lo presentado en el Plan Nacional de Desarrollo el pasado mes de abril, que se fijó en 6 por ciento durante todo el sexenio; “no se alcanza a vislumbrar de dónde ni con qué”.
En entrevista, Serrano Camarena indicó que el problema es que otros países ofrecen actualmente mejores condiciones y mayor certeza que el país, lo que ha llevado a que los inversionistas ya no piensen en México para instalarse; aclaró que esto no afectará por el momento en el caso de Coahuila, que debe mantener la certidumbre al menos a nivel regional en términos legales.
“Seguir dándole al inversionista la seguridad de que su inversión primero que nada está protegida, de que la mano de obra sigue teniendo contratos bastante favorables tanto para el patrón como para los sindicatos, que el ambiente laboral es de competitividad y no de competencia entre patrones, trabajadores y el propio gobierno”.
Aseguró que mientras las cadenas productivas de nuestro estado sigan trabajando como hasta ahora, “no vamos a tener ningún contratiempo al menos en los siguientes dos o tres años”.
No obstante, subrayó que ahora más que nunca Coahuila requiere finanzas fuertes, que hagan frente al aumento en las tasas de interés, y actualmente no se está contribuyendo nada al capital de la deuda pública, por lo que el Estado en ese aspecto “muestra una debilidad crónica por los siguientes, no 25, 30 años, por el momento toda la estrategia fiscal y de egresos para el estado no muestra una mejoría ni siquiera dentro de 20 años”.
Expresó que además de los malos números económicos para México, le afecta el ambiente internacional; donde hay una guerra comercial entre Estados Unidos y China, en tanto que Europa no crecerá más del 0.8 por ciento; “Italia está en recesión, Alemania y España están por entrar en recesión y Grecia está quebrada; y no ven como el Banco Cenmtral Europeo va a corregir eso, al momento en que Europa, que es el segundo socio comercial de México, baje, nuestro país va a tener un impacto”. (ESMERALDA SÁNCHEZ | INFONOR)
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